El presidente de Fiat-Francia, en una «cárcel obrera».
Los secuestradores del presidente de la empresa automovilística Fiat-Francia, Luchino Revelli Beaumont, han enviado a dos periódicos de París esta fotografía de su rehén. La foto iba acompañada sólo por una nota en la que se decía: «Detenido en una cárcel obrera y juzgado por un tribunal de trabajadores.» Con esta iniciativa los secuestradores parecen querer demostrar que Revelli está vivo y que su secuestro no ha sido obra de delincuentes comunes, hipótesis que había barajado la policía. También puede ser un indicio de que sus captores desean activar las negociaciones para canjearle.Revelli fue secuestrado el pasado 13 de abril. Un «Comité de defensa de los trabajadores italianos en Francia» reivindicó la acción y exigió un rescate de unos cuarenta millones de pesetas, así como el reparto de víveres y medicamentos entre los trabajadores italianos desempleados que residen en Francia.
