Detenido tras tirar un servilletero a la cara al cliente de un bar
Al agredido, que estaba en un local de Alcorcón, le pidieron el pago de una cerveza
Lo que era una noche tranquila con unos amigos en un bar terminó con un herido y con un detenido. Un vecino de Alcorcón, Francisco R. P., de 43 años, fue detenido en la madrugada del domingo después de que lanzara un servilletero a la cara al cliente del local, Esteban C. S., de 44 años y también vecino de la localidad. Este sufrió un fuerte golpe además de un corte, por lo que necesitó ser trasladado al servicio de urgencias del hospital Fundación Alcorcón. Supuestamente, detrás había el pago de una cerveza.
Los hechos ocurrieron alrededor de las dos de la madrugada en un bar de la calle de San Juan, en el centro de Alcorcón. Varios clientes llamaron al teléfono 091 de la Policía Nacional, ya que se estaba produciendo una reyerta en el interior del local.
Según explicó la víctima a la policía, estaba con un amigo sentado en el bar “charlando tranquilamente”. Junto a ellos se encontraban otras dos personas. En un momento dado, se acercó uno de ellos y le reclamó que le pagara el pago de una cerveza que le debía. Esteban C. S. se negó a hacerlo, porque, según su versión, no tenía nada pendiente con él.
La historia no se quedó ahí. El peticionario de la cerveza regresó a su sitio, mientras Esteban continuaba hablando con su acompañante. Justo cuando se giró para el lugar en que estaban las otras dos personas, vio a Francisco R. P. que le increpaba con un servilletero con el logotipo de una marca de cervezas en la mano. En ese instante se lo arrojó a la calle “impactando de lleno en esta”, según reconocen fuentes policiales.
Permaneció en el local
El herido y su acompañante llamaron a la policía para denunciar lo ocurrido. El supuesto atacante se quedó en el bar incluso mientras la víctima estaba hablando con los agentes. Eso permitió que Esteban pudiera señalarlo directamente y que los funcionarios le detuvieran en el acto, ante la mirada de sorpresa del resto de la clientela por todo lo que había ocurrido en cuestión de minutos.
El herido fue atendido en primera instancia por una ambulancia de la Cruz Roja que le hizo las primeras curas. Pero ante la gravedad de las lesiones le trasladaron hasta el hospital de Alcorcón para que le hicieran una cura más exhaustiva. El golpe del servilletero le produjo dos brechas que necesitaron una decena de puntos de sutura.
El detenido, que no opuso resistencia en ningún momento, fue conducido a comisaría acusado de un delito de lesiones. Se confesó culpable en todo momento.
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