La crisis destruirá 6.000 empleos en la hostelería vasca

Los hosteleros lanzaron ayer un contundente mensaje de socorro a la Administración. La crisis económica se está mostrando especialmente feroz con el sector, tan expuesto a las vicisitudes económicas de la ciudadanía, que urge la adopción de "medidas eficaces y visibles" por parte de las autoridades (ayuntamientos, diputaciones y Gobierno vasco), según exigió ayer Ángel Gago, secretario general ejecutivo de la Federación de Hostelería del País Vasco (FHPV).

Las dificultades económicas se traducirán a finales de 2008 en un descenso de la actividad hotelera de entre el 18% y el 22%, según datos de la FHPV. Esta bajada de ventas se traduce ya en un descenso de los márgenes de beneficio y en una destrucción de empleo que Gago fijó en 6.000 puestos de trabajo a la conclusión del presente ejercicio. Si la hostelería daba trabajo en 2007 a 54.000 personas, las estimaciones de la FHPV anticipan una rebaja en 2008 del 11,1% hasta quedarse en 48.000 trabajadores. Gago calificó de "inevitable" y "lógica" esta destrucción de empleo, y la justificó por los incrementos tanto del coste de alimentos y bebidas ("por encima del 7%"), como de los costes laborales (más del 5%). "Que la hostelería haya mantenido incrementos del IPC algo superiores al 4% evidencia que no se estaba repercutiendo la totalidad del coste en los precios", expuso.

Empleará a 48.000 personas a finales de año, un 11% menos que en 2007

Los hosteleros vascos consideran que su considerable peso específico en el Producto Interior Bruto (PIB) no se traduce en una preocupación proporcional entre los dirigentes políticos. "Hemos oído hablar estos días de China, del automóvil, de los bancos y de mil cuestiones, pero no ha habido ni una sola mención a nuestro sector", protestó Gago. De las más de 15.000 empresas que lo integran en la comunidad autónoma, el 97,98% cuenta con menos de 20 empleados. "Con todos estos autónomos se puede hacer más cosas, además de decir 'te acompaño en el sentimiento", se quejó. También lamentó la actitud de los sindicatos, en los que afirmó "haber perdido toda esperanza" porque, según sus palabras, "siguen reclamando subidas salariales del IPC más tres puntos".

Entre las medidas, "sin coste para la Administración", que los hosteleros ya han trasladado a las instituciones figuran la devolución inmediata del IVA soportado, la disminución de la entrega a cuenta o pago fraccionado, la vigilancia del absentismo -Gago habló de cotas "de hasta el 14%: una auténtica burla", dijo-, el aumento de la seguridad ciudadana y la ampliación de horarios de cierre. Así mismo, calificó de "desesperada" la situación de los empresarios que explotan negocios de ocio nocturno.

Tampoco dibujó un horizonte más esperanzador para el subsector de alojamiento, en el que se ha detectado un ligero descenso en la actividad "que crea inquietud" y donde no existe una percepción "interesante" de movimientos de reservas.