Los mercados castigan a EADS y Rolls Royce

Revés en los cielos y sobre el parqué para el consorcio europeo EADS, la matriz de Airbus, y para el fabricante de motores Rolls Royce. Ambos están siendo castigados por los mercados durante la jornada de hoy tras el incidente en vuelo del A380, con 433 pasajeros y 26 miembros de la tripulación a bordo. A las cinco de la tarde, EADS caía un 3,81% en los mercados; mientras que Rolls Royce bajaba un 5,12%.

El incidente sufrido por el avión de la australiana Qantas es un duro golpe para Airbus. El 380 es el superavión con el que la industria aeronáutica europea quiso plantar la cara al todopoderoso 747 de la estadounidense Boeing. Es el resultado de más de 10 años de investigación y un desembolso de 12.000 millones de euros. Es la historia de varios retrasos, con un coste multimillonario. Y ha sido, como todas esas grandes obras que Europa se pone a hacer en grupo, un dolor de cabeza.

Con el fallo del motor que esta madrugada obligó a un aterrizaje de emergencia de un A380 en Singapur, el avión comercial más grande del mundo se encuentra con una nueva piedra en el camino. Aún no se sabe si el incidente se debe a un problema propio del motor o a una interferencia externa, como el choque con aves o residuos.

Además, el estreno no se ha deslizado sobre una alfombra roja: Airbus entregó la primera unidad en 2007 a Singapore Airlines, con un retraso de casi dos años cuyo coste se cifró en 5.000 millones de penalización. A continuación se repitieron los retrasos en otras entregas y la previsión de pedidos, con la dureza de la crisis económica, se revisó a la baja varias veces.

Airbus tenía hasta junio pasado 234 encargos de 17 compañía aéreas, y hasta esa fecha había servido 37 unidades: Air France tiene 4; Emirates, 13; Lufthansa, 3; Qantas, 6; y Singapore Airlines, 11. Las compañías que más encargos tienen de este modelo son Emirates (90) y Qantas (20).