La incertidumbre genera volatilidad

Los mercados de valores han entrado en una fase de alta volatilidad ante unos acontecimientos que pueden cambiar las reglas del juego en algunos sectores importantes. La vaguedad en las resoluciones del G-20 respecto del sector financiero han sido, en general, bien recibidas por gestores e inversores, a pesar de que en Europa es muy posible que llegue la tasa bancaria. Por otra parte, al decantarse más por la reducción del déficit que por la estimulación de la economía, el G-20 santifica las políticas de austeridad que tan mal han encajado los mercados en las últimas semanas.

Por si esto fuera poco, en España está la cuestión de la revisión del sistema eléctrico, que la mayoría de los analistas considera como un vacío regulatorio importante, tanto que recomiendan a sus clientes limitar sus riesgos en el sector.

El Ibex 35 abrió con algunos altibajos que le llevaron enseguida a perder los 9.500 puntos, pero en esos niveles el papel reduce la presión y menudean los tanteos compradores, lo que se traduce en más altibajos y en una mayor volatilidad. Poco antes del cierre se alcanzaron los 9.705,20 puntos, máximo intradía, pero el cierre fue ligeramente inferior, con 9.688,50 puntos y una subida del 1,61%.

El interés de los inversores por el mercado español se centra en los grandes valores, con mayor liquidez y, por tanto, más facilidad para entrar y salir para los inversores a corto, que en sesiones como estas son los que llevan la voz cantante.

Los indicadores económicos conocidos ayer tampoco lograron animar a los inversores, pues en la eurozona, la masa monetaria -activos en manos del público y algunos depósitos y activos a corto plazo- volvió a descender en mayo, indicando con ello que el dinero continúa sin fluir con facilidad al sistema y que su circulación sigue siendo limitada.

En Estados Unidos crecieron los ingresos y gastos personales en mayo, aunque los consumidores continúan ahorrando. El índice de actividad de la Reserva Federal de Chicago, sin embargo, confirmó con su descenso de 0,04 puntos que la recuperación económica se enfría paulatinamente. Un dato más actual, el índice de actividad empresarial de la Reserva Federal de Dallas para el mes de junio, aportó un descenso del 4% frente a la subida del 2,9% de mayo.