Una obra infantil de temática gay indigna a la derecha vienesa
En Rey y rey, el príncipe no se enamora de una princesa sino de otro príncipe. La obra de teatro infantil se ha estrenado en Viena con las entradas agotadas y con la derecha radical austriaca en pie de guerra.
Basada en un libro holandés para niños de Linda de Haan (publicado en 2002 con ilustraciones de Stern Nijland y traducido a varios idiomas; en castellano, editorial Serres, 2004), Rey y rey cuenta cómo un príncipe que se quiere casar se enamora del hermano de una de las princesas aspirantes a la corona. El amor es recíproco, así que ambos muchachos contraen matrimonio para vivir felices y comer perdices, tal y como suele ocurrir en los cuentos de hadas. "Este cuento es útil para aprender a aceptar la diversidad, y supone una señal contra la homofobia", se lee en la programación del teatro vienés. Pero para Eduard Schock , jefe de la delegación de Viena del ultraderechista Partido Liberal (FPÖ), esta obra es un intento de "entrar por la puerta trasera para hacer apetecible la sexualidad". Schock inculpa a los socialdemócratas de intentar "destruir la familia como base de la sociedad".
A raíz de la polémica, tres escuelas han anulado sus reservas para ver la obra. Pero otras tantas han decidido acudir precisamente a raíz de la discusión, según explica Stefan Rabl, director de la sala de teatro Dschungel, que cuenta con subvenciones municipales y donde la obra se representa hasta el 20 de febrero. Rey y rey ha sido producida por la compañía teatral Thearte y por la Sección de Antidiscriminación del Ayuntamiento de Viena, gobernado por la socialdemocracia.
El diario popular Kronenzeitung arremete contra el concejal cultural de Viena, Andrea Maliath-Pokorny, por prestar apoyo a un espectáculo homo que sumerge al público infantil en una "jungla de sentimientos y sensaciones morbosas". El socialdemócrata Maliath Pokorny replicó a las críticas: "El tema de la discriminación contra los homosexuales no tiene por qué excluirse del teatro para niños. Se trata de transmitir a los pequeños diferentes realidades sociales y la igualdad de derechos. Respeto, amor y aceptación son valores que conviene transmitir desde pronto".
El libro de Linda de Haan lleva ya un tiempo levantando polvareda. En EE UU hubo varios casos en que padres de alumnos protestaron por temor a que Rey y rey transmita mensajes subliminales a favor de los gays. En 2006, unos padres denunciaron a los maestros y al personal administrativo del colegio de educación elemental de Estabrook (Massachusetts) por permitir que se leyera este libro a niños de siete años.
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