El intenso presente del libro futuro
Los aspirantes a reinar en el mercado del 'e-book' amplían y diversifican iniciativas
El futuro del e-book se escribe día a día con apasionantes giros narrativos y múltiples protagonistas que contribuyen a modelar el cambiante presente de lo que, algún día, acabará siendo el negocio del libro electrónico del siglo XXI y venideros. La carrera hacia la mayor tajada del mercado del libro digital está al rojo vivo... y el favorito sigue siendo una incógnita.
Hace apenas un mes Barnes and Noble, la mayor librería del planeta, irrumpía en el mundo del libro electrónico con un catálogo de 700.000 títulos, frente a los 345.000 que ofrece Amazon, la empresa que de momento lidera el sector. Su oferta, a primera vista, era más que jugosa, aunque muchos de sus libros no sean precisamente nuevos. Pero se pueden leer directamente en el ordenador, un gran paso para todo lector que carezca de un Kindle, el lector portátil al que están conectados los que vende Amazon.
Además, toda la oferta de Barnes and Noble es compatible entre diferentes ingenios tecnológicos enemigos entre sí: iPhone y Blackberry, ordenadores Mac y PC. Eso sí, también se han encargado de tener su propio lector, el Plastic Logic eReader, aparato que lleva una década en la incubadora, que no se venderá hasta el año próximo y con el que esperan revolucionar el mercado.
Y es que una de las batallas decisivas en el mundo del e-book gira precisamente en torno a la compatibilidad entre los diferentes soportes portátiles. Sony, que como empresa discográfica perdió hace una década la batalla de la música digital frente a Apple, no quiere repetir su propio drama. Creadora del e-Reader, el competidor del Kindle, y propietaria de una librería digital cuyos títulos han estado encadenados hasta ahora a su propio lector, anunció la semana pasada su intención de abrazar el formato abierto Epub, el mismo que utiliza Barnes and Noble. Eso significa que su librería digital tendrá muchos más clientes potenciales, incluidos los usuarios de Mac, despreciados hasta ahora en favor de los propietarios de PC. No obstante, Sony seguirá manteniendo el DMR (protección anticopia), por lo que sus libros digitales no se podrán compartir. Lo mismo ocurre con los de Amazon, algo que ha generado gran frustración en la Free Software Foundation, que está embarcada en una campaña contra el software anticopia porque "es una amenaza contra el intercambio gratuito de ideas".
El problema de la oferta también jugará un papel clave en cuanto a la consolidación de un mercado que ha incrementado su volumen de negocio en un 134% en apenas un año, según la Association of American Publi-shers. En junio, las ventas de libros digitales generaron 14 millones de dólares en Estados Unidos, la cifra más alta de su historia (apenas un 1% respecto al volumen total de ventas de libros pero sin duda significativa). Y otra nota a tener en cuenta: los tres libros más vendidos para el Kindle en julio fueron tres títulos que se ofrecían gratis, avalando así las teorías de Christopher Anderson, autor de Free, un polémico libro que defiende la necesidad de ofrecer productos gratuitos para impulsar el negocio de esos mismos productos.
Pero no sólo se trata de vender. En un mercado en el que todo es nuevo, hay quien está buscando alianzas y alternativas que puedan abarcar diferentes modelos de negocio. Sony acaba de asociarse con la firma de software Overdrive, encargada de digitalizar el contenido de la mayoría de las bibliotecas estadounidenses. El objetivo: que los usuarios de esos centros puedan tomar prestados los libros digitales de forma virtual y leerlos en su eReader.
Amazon ha firmado alianzas con seis universidades, entre ellas Princeton, para que la versión XL de su Kindle se utilice en pruebas entre sus alumnos desde el próximo otoño. La idea es, por un lado, poner a disposición de los alumnos todos los libros de texto que se utilizan en esos centros; y por otro, ahorrar papel y abrir el camino hacia una universidad más ecológica.
Además hay quien está experimentando con las posibilidades multimedia del libro digital. ¿Por qué limitarse a leerlo si también es posible escucharlo con una banda sonora a medida o leído por su autor? Así será The death of Bunny Munro, la nueva novela de Nick Cave, a la venta este mes en edición para iPhone, con la posibilidad de alternar entre la lectura o el audiolibro (la voz de Nick Cave es un aliciente) y con una banda sonora compuesta por el músico australiano.El mercado del libro electrónico en EE UU ha crecido un 134% en un año
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