Mazazo judicial a la SGAE
La Guardia Civil desarticula una trama que desviaba fondos de la sociedad a través de empresas privadas - Detenidos Teddy Bautista y otros tres directivos
No había pasado ni un día desde de las elecciones a la junta directiva de la Sociedad General de Autores (SGAE), cuando decenas de agentes de la Guardia Civil aterrizaron en el Palacio de Longoria, en Madrid, la sede de la sociedad. Desalojaron a los trabajadores para llevar a cabo un registro exhaustivo ordenado por el juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz. La sospecha de la corrupción salpicaba de lleno a la entidad: cuatro directivos -entre ellos al presidente de su consejo directivo, Eduardo Teddy Bautista, a punto de ser reelegido en el cargo- fueron detenidos por una trama que supuestamente desviaba fondos de la entidad a empresas privadas. Otras cinco personas fueron detenidas en la operación. El juez Ruz les imputa los delitos de apropiación indebida, estafa y administración desleal por el fraude, cometidos de forma continuada entre los años 2003 y 2007 e investigados por la Fiscalía Anticorrupción.
La SDAE contrataba con una empresa dirigida por algunos de sus cargos
Bautista debía ser reelegido en su puesto el próximo 12 de julio
Los otros dos directivos de la SGAE detenidos son su director general, Enrique Loras, que es también consejero de la SDAE, y el director económico y financiero, Ricardo Azcoaga. Pero el principal implicado en la supuesta trama de corrupción es José Luis Rodríguez Neri, exconsejero de la entidad y actual director general de la SDAE (Sociedad Digital de Autores y Editores, controlada al 100% por la SGAE y creada en el año 2000 para proteger los derechos de autor en Internet y otros desarrollos relacionados con las nuevas tecnologías). Junto a él fueron detenidos su mujer, su cuñada y directivos y trabajadores de una empresa llamada Microgénesis. Es, precisamente, a través de esta sociedad desde la que se cometían los presuntos delitos.
Microgénesis era una de las principales contratistas de la SDAE. Se trata de una sociedad anónima dedicada a realizar labores de consultoría sobre aplicaciones informáticas y a suministrar programas. A ella corresponden algunos de los principales proyectos de la SGAE en el campo digital, como el sistema Teseo (Tecnología de Servicios y Organización), que diseña aplicaciones orientadas a defender los derechos de autor en la web, y el Portal Latino, encargado de difundir la cultura latina y prestar servicios a los autores en Internet. El juez investiga también un segundo escalón de empresas que contrataban con Microgénesis e igualmente relacionadas con los detenidos.
El papel de Teddy Bautista parece, en principio, secundario, según los investigadores. Pero Rodríguez Neri, según la denuncia de Anticorrupción, era una persona de la máxima confianza del presidente del consejo directivo de la SGAE, por quien fue designado para dirigir su filial digital. Fuentes de la investigación aseguran que, dado el control que Teddy Bautista ejerce sobre la sociedad, es muy difícil que no conociera o tolerara las actividades del principal imputado y la trama societaria que creó con el resto de implicados. Ahora tendrá que demostrar ante el juez que no estaba al corriente de esas operaciones para evitar ser imputado como cómplice o encubridor.
La investigación parte de una denuncia presentada en 2007 ante la Fiscalía Anticorrupción por la Asociación de Internautas, la Asociación de Usuarios de Internet, la Asociación de Pequeñas y Medianas Empresas de informática y nuevas tecnologías y la Asociación Española de Hosteleros Víctimas del Canon. En 2010, el entonces titular del juzgado central de Instrucción número 5 de la Audiencia Nacional, Baltasar Garzón, abrió diligencias. El caso se reactivó el jueves, cuando la Guardia Civil presentó ante el juez Ruz un oficio en el que anunciaba las detenciones y solicitaba permiso para realizar los registros.
Los detenidos de la empresa Microgénesis, la que presuntamente podría haber utilizado Rodríguez Neri para desviar fondos utilizando su cargo de director general de la SDAE para contratar servicios -que según los investigadores podrían no haberse prestado- están íntimamente relacionados con él. Son María Antonia García Pombo, su esposa y expresidenta de la entidad; su cuñada, Eva García Pombo, apoderada y exconsejera delegada de la entidad; Rafael Ramos, actual administrador único y un trabajador llamado Celedonio Marín. Eva García Pombo y Rafael Ramos compaginaron estos cargos con otros en la SDAE. Elena Vázquez, propietaria de la mayoría de las acciones de Microgénesis, también fue detenida.
Unos 50 agentes de la Unidad Central de Operaciones de la Guardia Civil llevaron a cabo los registros durante todo el día en el palacio de Longoria, sede de la SGAE en una operación que denominaron Saga. También entraron en otros 16 locales de las empresas investigadas y los domicilios de varios detenidos. Bautista y el resto de arrestados pasarán previsiblemente hoy a disposición judicial. A última hora de ayer, seis de los detenidos, entre ellos Bautista, fueron trasladados a la Comandancia de la Guardia Civil de Tres Cantos y a un cuartel de Las Rozas.
La operación se produjo horas después de que se anunciara el triunfo de la lista que apoyaba Teddy Bautista en las elecciones a la junta directiva de la SGAE. El resultado suponía otros cuatro años más de mandato del músico canario. Todos los puestos en competición fueron ocupados por gente afín a Bautista, ahora detenido. La oposición obtuvo el 43% de los votos pero no logró colocar a ningún vocal. La junta directiva salida de estas elecciones se reunirá el próximo día 12 para elegir presidente, tres vicepresidentes y presidente del Consejo de Dirección, el cargo que actualmente ocupa Bautista.
Babelia
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