Vídeo | Una ciudad convertida en escombros: así está Bajmut tras el acoso ruso

Las imágenes grabadas desde el interior de un coche que circula por los barrios situados al oeste del río Bajmutovka, muestran edificios destruidos, grandes cráteres provocados por la artillería y las calles completamente vacías. Bajmut y la localidad cercana de Soledar, ambas en la región ucrania de Donetsk, han sido zona de ataque de las tropas rusas durante los últimos meses.

En el vídeo que acompaña a esta noticia observamos los resquicios de lo que antes era una de las ciudades más importantes de Donbás. La batalla en este rincón de la provincia de Donetsk es, a día de hoy, la más intensa de la guerra. Rusia ha conseguido avanzar en su intento de controlar la ciudad de Bajmut, y el domingo pasado declaraba que su ejército había avanzado hacia las afueras del norte de la ciudad. El martes, las autoridades rusas instaladas en la región de Donetsk afirmaron que tenían el control de Soledar, pero el presidente ucranio, Volodímir Zelenski, declaró posteriormente que continuaban los combates por la ciudad situada al noreste de Bajmut.

De las entre 70.000 y 80.000 personas que vivían en Bajmut antes de la invasión a gran escala, apenas quedan unos 7.000 habitantes, o incluso menos, según las autoridades locales. La mayoría subsiste en los sótanos y refugios improvisados, donde viven en unas condiciones de auténtica pobreza y dependen de la ayuda humanitaria que unos pocos voluntarios acercan a la ciudad. En un perímetro de 20 kilómetros alrededor de Bajmut no hay arboleda o granja que no esté ocupada por unidades de artillería, camiones de combustible camuflados o compañías de tanques en posición de combate en primera y segunda línea de frente —a dos kilómetros de las filas rusas—.

Rusia quiere asegurar la que sería su primera victoria militar en medio año, tras las humillantes retiradas protagonizadas desde otoño en las provincias de Járkov y de Jersón, pero los refuerzos ucranios de los últimos días han frenado el avance de los mercenarios del grupo Wagner. Tras la toma en junio y julio de las ciudades de Severodonetsk y Lisichansk, en la región de Lugansk, y las mayores victorias de Rusia en Donbás, las tropas del Kremlin empezaron a asediar Bajmut de forma sangrienta. La estrategia de Putin es clara: sitiar, bombardear y arrasar para conquistar hasta quebrar la resistencia.