¿Puedo tender la ropa?

Empezó cazando tormentas y ha terminado avisando si se puede hacer una barbacoa al aire libre. Emilio Rey (Madrid, 1965) estrena TuMeteoMad y TuMeteoBCN (en español y catalán) con intención de presentar información del tiempo en un lenguaje cercano y con información actualizada. “No encontrarán nada de isobaras o ciclogénesis. El contenido lo hacemos personas y hablamos con personas. El tiempo afecta a todo el mundo, en su vida diaria. En nuestra aplicación te decimos cómo vestirte o si puedes hacer una barbacoa”, subraya.

Desde que creó el canal @digitalmeteo en Twitter esa ha sido una de sus funciones, contestar a cualquiera que preguntase cómo estaba el tiempo en su zona y si podía salir con la bici. Otra de las ventajas es que incluye datos por zonas desde hace 30 años.

 Como suele habitual, la aplicación de Apple se ha demorado. Saldrá, según sus cálculos, dentro de una semana. Ya está en Android y han llegado a un acuerdo para publicar también para Windows Phone y Windows 8. En todos los casos es gratis. “Hay muchas, no tiene sentido competir en el precio, sino en la calidad y la forma de contar. La mayoría se quedan en símbolos y claves poco comprensibles”, justifica. El equipo de Tu Meteo está compuesto por nueve personas.

 El modelo de negocio pasa por el contenido. “Al igual que hay branded content, nosotros hacemos branded meteo”, expone, “se trata de usar información útil para añadir posibles planes. En los textos hay contenidos relacionados con actividades. Si hay una feria del pulpo en Galicia y va a llover, pondremos que te lleves el chubasquero”. Durante los cuatro primeros meses cuenta con el contenido de Sony. Acaban de cerrar una versión para Valencia y otra Valladolid.

En esta misma línea, creen que puede interesar a estaciones de esquí o por temas. “Se podría hacer un TuMeteo Música centrada en la temporada de festivales”, sugiere.

Rey descubrió su pasión por los fenómenos meteorológicos mientras estudiaba informática. Su primera página web, hace 11 años, era un lugar donde se mostraban vídeos, consejos, e incluso organizaba cursos para meterse en tormentas y contarlo. “Era sin ánimo de lucro, estuvimos con fanáticos de la acción, pero también con muchos periodistas que querían aprender para hacerlo en sus medios”, matiza.