Confuso anuncio de Vodafone Irlanda sobre el bloqueo a sus clientes del uso de P2P

Vodafone Irlanda anunció que iba a prohibir el empleo de P2P. De hecho, en las condiciones del contrato para sus clientes de banda ancha aparece una línea en la que se advierte que "el servicio no puede ser utilizado para el peer-to-peer".. Esta advertencia figuraba hace una semana más ampliada en otras páginas del mismo sitio, pero, según torrentfreak, ha desaparecido de muchas de ellas y sólo permanece en la mencionada página lo que hace dudar de que la compañía mantenga su propósito. El sitio recoge ahora un testimonio no oficial según el cual la compañía atribuye a un error la inclusión de la citada condición.

Un portavoz de Vodafone España, sin comentar el episodio irlandés, ha precisado a este diario que la empresa no se plantea esta política comercial.

En Estados Unidos, ya en 2007, la operadora Comcast bloqueó de facto diferentes protocolos P2P que permiten el intercambio de archivos entre los internautas. ATT y Verizon tienen políticas similares en móviles. El P2P está popularmente asociado a las descargas de archivos protegidos por derechos de autor, pero el protocolo también se emplea masivamente para otros fines que no son sospechosos o sobre los que no se debate su legalidad. El festival South by Southwest, en Estados Unidos, por ejemplo, distribuye las creaciones musicales de los artistas invitados por P2P y el propio Gobierno británico lo usa para dar información de sus gastos.

El incremento del intercambio de archivos a través de P2P aumenta el tráfico y, ya actualmente, las operadoras de móviles penalizan a sus clientes que sobrepasan un determinado volumen rebajando la velocidad de conexión. La supuesta decisión de Vodafone en Irlanda ha hecho temer a los internautas que se extienda esta política a otros países.

Esta noticia se produce mientras se ha reavivado el debate sobre la llamada tarifa plana en las conexiones móviles. Las principales operadoras, como Telefónica o Vodafone, han advertido de que no podrán mantenerla ya que necesitan capitalizarse para invertir, precisamente, en la mejora de las redes que deben gestionar este incremento de tráfico, atribuído no solamente al P2P sino, también, al mayor consumo de material audiovisual.

En Francia, la ley antidescargas, que penaliza el intercambio de archivos protegidos, se centra precisamente en la persecución del P2P. Esta política ha hecho que los analistas avisen de que ello empujará a los internautas a buscar otro tipo de protocolos.