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Un telón cósmico de polvo frío

El satélite 'Planck' de la ESA observa estructuras filamentosas que rodean el Sistema Solar

La última imagen obtenida por el satélite Planck de la ESA muestra filamentos gigantes de polvo frío que se extienden a lo largo de la Vía Láctea, cuyo análisis podría ayudar a determinar las fuerzas que dan forma a nuestra galaxia y que provocan la formación de las estrellas, según la agencia espacial europea.

Planck está diseñado principalmente para estudiar los mayores misterios de la cosmología, por ejemplo cómo se formó el Universo o se formaron las galaxias. La nueva imagen hecha pública extiende el rango de sus observaciones a las estructuras de polvo frías de nuestra galaxia. Muestra la estructura de filamentos de polvo que rodean al Sistema Solar, a una distancia de unos 500 años luz. En concreto, los filamentos arrancan de la Vía Láctea, que es la región rosa que se extiende en horizontal en la parte inferior de la imagen. En esta zona, la radiación procede de mucho más lejos, del lado opuesto del disco de la Vía Láctea.

Esta imagen ha sido codificada con colores para poder apreciar las diferencias de temperatura en las estructuras de polvo. Además, los tonos blanco-rosados marcan el polvo que se encuentra a unas decenas de grados por encima del cero absoluto, mientras que las zonas con colores más intensos muestran el polvo con temperaturas en torno a los 261 grados centígrados bajo cero, tan sólo 12 grados por encima del cero absoluto. Igualmente, el polvo más cálido es el que está concentrado en el plano de la galaxia, mientras que el polvo en suspensión por encima y por debajo del disco galáctico se encuentra a menor temperatura.

"Todavía no se comprende porqué estas estructuras tienen estas formas tan peculiares", comenta el científico del proyecto Planck para la ESA, Jan Tauber. En este sentido, las zonas más densas se conocen como nubes moleculares, mientras que las más difusas reciben el nombre de cirros. Ambas están formadas por polvo y por gas, aunque el gas no se puede observar directamente en las imágenes. Los puntos más brillantes de la imagen se corresponden con densos cúmulos de materia en los que tiene lugar la formación de estrellas.

El telescopio espacial Herschel, también de la ESA, puede ser utilizado para estudiar este tipo de regiones con más detalle, pero sólo Planck es capaz de detectarlas a lo largo del Universo. Herschel y Planck se lanzaron juntos en mayo de 2009 y los dos se encuentran estudiando los componentes más fríos del Universo. Concretamente, Planck estudia las grandes estructuras, mientras que Herschel realiza observaciones detalladas de regiones más pequeñas, como los cúmulos cercanos donde se forman las estrellas. A la vista de estos resultados, a los expertos les surge la pregunta de por qué la Vía Láctea presenta esta estructura de filamentos tanto a pequeña como a gran escala. "Es una gran pregunta", concluye Tauber.

La nueva imagen es una combinación de los datos obtenidos por el Instrumento de Alta Frecuencia (HFI, por sus siglas en inglés) de Planck, en las longitudes de onda comprendidas entre los 540 y los 350 micrómetros, y de una imagen de 100 micrómetros obtenida por el satélite IRAS en el año 1983.

Estructuras de polvo frías a la distancia de hasta 500 años luz del Sistema Solar observadas por el satélite <i>Planck</i>. La región rosada en la parte inferior de la imagen es la Vía Láctea.
Estructuras de polvo frías a la distancia de hasta 500 años luz del Sistema Solar observadas por el satélite Planck. La región rosada en la parte inferior de la imagen es la Vía Láctea.ESA/HFI CONSORTIUM/IRAS

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