El Papa respalda a su Iglesia en España con otras dos visitas

La jerarquía del catolicismo español recibió ayer con regocijo la noticia de que Benedicto XVI visitará Santiago de Compostela y Barcelona en noviembre próximo. Con este viaje y el previsto para el verano de 2011 con motivo de la Jornada Mundial de la Juventud en Madrid, España se convierte, con tres peregrinaciones papales, en el país de la cristiandad más visitado por el pontífice alemán desde que fue elegido en abril de 2005, con 78 años de edad. En la próxima Semana Santa cumplirá los 83. El papa Ratzinger también ha viajado en tres ocasiones a su país de nacimiento, pero en una ocasión lo hizo en visita privada, a su Baviera natal.

Si las atenciones pastorales del Papa denotan preocupación por un país determinado, este cúmulo de visitas ?la primera fue a Valencia, en 2006, con motivo del VI Encuentro Mundial de las Familias?? confirma que al Vaticano le angustia España como símbolo de relativismo moral y de laicismo fundamentalista. Son los dos "jabalíes que están devastando la viña" del catolicismo europeo, según el Papa. Los obispos españoles buscan torcer ese proceso, y Roma, que no se contagie al resto de las naciones occidentales.

Es en esta clave como hay que interpretar este mimo al episcopado que lidera el cardenal de Madrid, Antonio María Rouco. En concreto, con la visita a Barcelona para consagrar el templo de la Sagrada Familia se pretende fortalecer el combate de la Conferencia Episcopal contra el Gobierno socialista, al que la jerarquía acusa de tener un programa de destrucción de la familia cristiana. El colmo de ese empeño sería, según los prelados, la aprobación de la Ley de Salud Sexual y Reproductiva y de Interrupción Voluntaria del Embarazo, más conocida como ley del aborto. El viaje a Barcelona también impulsará el proceso de beatificación del arquitecto del templo, Antoni Gaudí.

El anuncio oficial de la visita del Papa a la capital catalana provocó una indisimulada alegría y satisfacción en el arzobispado de Barcelona y, sobre todo, en el patronato de la Sagrada Familia. También levantó otro tipo de reacciones entre los partidos políticos catalanes, ya que la visita del Papa se producirá probablemente en periodo electoral. Hace más de un año el arzobispado de Barcelona inició las gestiones para conseguir que el Papa consagrase el templo de la Sagrada Familia, uno de los símbolos de la arquitectura de Gaudí, que cada año recibe más de dos millones de visitantes. Ayer, el cardenal arzobispo de Barcelona, Lluís Martínez Sistach, ya animaba a los obispos catalanes a preparar la visita de Benedicto XVI.

Lo que también se tendrán que acelerar son las obras de la nave central del templo. Joan Rigol, presidente del Patronato de la Sagrada Familia, apuntó ayer que estarán listas en mayo y detalló que ahora están acabando los trabajos en el altar de una iglesia que tendrá cabida para 9.000 personas. En cuanto a la posible coincidencia de la visita del Papa con las elecciones catalanas, Rigol fue claro: "Lo fijo ahora es el viaje del Papa y lo que no está fijado son las elecciones". En opinión de los políticos catalanes, la visita del Papa "no interferirá" en la campaña electoral. Así se pronunciaron diversos representantes del tripartito que gobierna Cataluña. "Una cosa es la política y otra la Iglesia", señaló el diputado socialista Joan Ferran. Los comicios no están fijados. Hace cuatro años se celebraron el 1 de noviembre, pero el periodo se podría agotar hasta primeros de diciembre.

La visita a Santiago de Compostela, con motivo del Año Santo Jacobeo, subraya, por su parte, el carácter intelectual y europeísta de este sabio pontífice alemán. Escribió Goethe, considerado por Ratzinger como el más grande hombre de letras alemán, que "Europa nació peregrinando a Compostela". El Papa no quiere perderse el jubileo de este año santo ?no habrá otro hasta dentro de 11 años?, para subrayar su propio europeísmo. También culmina en Compostela su ruta por los grandes santuarios de la cristiandad, después de sus visitas a Lourdes, Fátima y la Apararecida en Brasil, entre otros.

Benedicto XVI llegará el 6 de noviembre a Compostela. "Quiero ir como peregrino de la fe y como testigo de Cristo resucitado, uniéndome a tantos peregrinos que llegarán a Santiago este año", le dijo Ratzinger el lunes pasado al arzobispo de esta archidiócesis, Julián Barrio, en la audiencia a la que acudió el lunes pasado con el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, informa. El arzobispo no pudo confirmar cuántas horas pasará el Papa en Santiago, ni si va a pernoctar en Galicia, pero dijo que el día 6 se lo "dedicará" a la ciudad del Apóstol, informa Silvia R. Pontevedra.