Seis hermanos armados se atrincheran en su casa de Idaho por temor a que les separen

El encierro de los niños comenzó tras el arresto de la madre cuando los ayudantes de Rahn acudieron a la casa para que los hermanos fueran trasladados a un centro de acogida. Fue entonces cuando éstos decidieron lanzar a sus 27 perros a los hombres del sheriff para después atrincherarse.

Desde el exterior, la policía trata en vano de que la hermana mayor, de 19 años, convenza a sus dos hermanos de 16 y 15 años y que están a cargo del resto, de que se "rindan" y salgan de la casa en la que no hay electricidad, ni agua ni línea de teléfono. Al parecer, los seis hermanos sobreviven en el interior con el agua de un lago cercano y sopa hecha con hojas de nenúfar.

Ayuda vecinal

Una de las vecinas, Mary Peters, ha declarado a la cadena estadounidense CNN que "muchos nos preocupamos por ellos y esperamos que se den cuenta de que no queremos hacerles daño y que no queremos dividirlos sino ayudar a la familia". Según su relato, "todos tienen miedo de acercarse a la casa por los perros y porque pueden encontrarse con una pistola de frente". Peters también ha dicho que uno de los perros mordió a un vecino que intentó entrar para ayudar a los niños. El mismo sheriff ha declarado que son perros salvajes y que recientemente habían matado a un pequeño alce de la zona.

La hermana mayor de 19 años trata de negociar con ellos desde el exterior

De momento, los ayudantes del sheriff han acordonado la carretera que llega hasta la casa pero temen que la situación se agrave aunque cuentan con que la hermana les disuada para que abandonen el encierro.