Zara incluye modelos maduras en su última campaña

«Me gusto mucho más ahora que hace 10 o 20 años. Obviamente sería ideal no envejecer pero mentalmente todo mejora con el paso del tiempo. Así que sí, es una paradoja: ganas confianza mientras envejeces. Pero… como que me gusta». La modelo polaca Malgosia Bela (40 años) es quien pronuncia estas palabras en Timeless, la última campaña de Zara. Junto a ella Kristina de Coninck (53 años) y Yasmin Warsame (41) protagonizan un editorial que se aleja de lo que nos tiene acostumbrados la enseña gallega: esta vez son modelos maduras las que ponen rostro a sus diseños mientras reflexionan acerca del paso del tiempo.

Las modelos lucen prendas de aires atemporales que sientan bien a cualquier edad y comparten su visión sobre la importancia de viajar o cómo las películas antiguas les siguen inspirando a la hora de vestir. Una apuesta por dar visibilidad a mujeres que, hasta hace poco, parecían olvidadas por la moda. Siguiendo los pasos de firmas como Céline (que encumbró a la octogenaria Joan Didion como musa hace un par de años) o Desigual y de enseñas low cost como Mango (hace unos meses eligió a la profesora y bloguera Lyn Slater de 63 años para protagonizar una de sus campañas), la hermana mayor de Inditex se suma a la apuesta por visibilizar a las mujeres maduras. Pero no tan mayores. En su día Desigual fichó a Alicia Borrás (70 años) y la marca Park Wien no deja de ganar seguidores en Instagram gracias a la nonagenaria que viraliza sus diseños. Zara prefiere rostros unos cuantos años más jóvenes pero se distancia de las facciones casi adolescentes que suelen poblar sus catálogos.

Puede que en su catálogo se cuelen inspiraciones de la colección más rompedora de Balenciaga o el último grito de Gucci. Y que los millenialls encuentren las últimas tendencias entre sus perchas. Pero Zara no quiere olvidarse de esas clientas que buscan básicos atemporales y prendas más clásicas. Las mismas que llevan años confiando en la firma gallega y que ahora encuentran un lugar destacado en el último movimiento de la marca. Zara no da puntada sin hilo y Timeless («eterno») es la mejor prueba.