Mételas en un cajón y no las saques hasta 2013

No te vamos a decir que tires nada porque la moda, como la vida, es cuestión de ciclos y Guadianas. Ahora lo quieres, ahora lo aborreces, ahora lo desechas y en un par de temporadas vuelta a empezar. A estas alturas de la película ya sabemos de qué pie cojean las tendencias y lo que te ponías ayer y odias hoy, volverás a desearlo mañana. Así que no, no vamos a incitarte a acabar con nada que no sean malos augurios.

Todo lo demás, incluso esos estampados, zapatos, colores o accesorios de los que ya no puedes más, porque 2011 ha sido un año de lo más impetuoso y vehemente (venga tonos fluorescentes y prints vistosos) para contrarrestar el clima general de desesperanza, guárdalo a buen recaudo, desintoxícate y en un tiempo: retómalo con ganas.