De compras por Valencia: la ciudad a la que viajó Sissi la emperatriz para comprar cerámica

Sissi atracó en Valencia para comprar cerámica. Según las crónicas de la época, la cinematográfica emperatriz llegó a la ciudad a finales de 1892 a bordo del Miamar, un lujoso e imponente buque con el que a menudo recorría el Mediterráneo. Dicen que llegó de incógnito, que la intención de Isabel de Baviera no era otra que pasar desapercibida. Sobra aclarar que no lo consiguió. Visitó la Ceramo, la fábrica de loza más prestigiosa de la ciudad; se dio un paseo por mercado de Navidad y entró en las distintas mercerías y tiendas (dicen que algunos comerciantes se quejaron por no salir mencionados en la ruta de la soberana) para comprar sombreros, agujas para el pelo, collares, abanicos… según recogieron los periodistas, dejando constancia ante todo de las llamativas propuestas comerciales que tenía la ciudad y todavía conserva.

Porque Valencia, elegida capital mundial del diseño 2022, tiene una facultad asombrosa de reinventarse. La ciudad esconde auténticos gabinetes de curiosidades que hibridan todo tipo de disciplinas: moda, arte, artesanía, libros y demás rarezas. Para abarcarlo todo en un día, a diferencia de Sissi, hemos decidido recorrerla al volante del nuevo Ford Puma. De líneas urbanas y aspecto vanguardista, el SUV de la marca estadounidense sirve para moverse de forma segura y limpia por sus barrios, gracias a los motores híbridos EcoBoost. Su tecnología híbrida combina un motor eléctrico que da soporte al de gasolina, mejorando la eficiencia del combustible y reduciendo las emisiones. Esto le ha valido la etiqueta Eco, con la que podemos acceder a cualquier rincón de la ciudad:tiendas vintage, espacios deco, galerías de artistas emergentes… Es imposible quedarse indiferente con la ruta de compras que hemos elaborado.

Artesanía (y modernidad) en el Barrio del Carmen

Alrededor del Centre del Carme y el Instituto Valenciano de Arte Moderno, IVAM, –dos espacios obligatorios si queremos exprimir al máximo la actividad museística del centro–, se esconden pequeñas tiendas que reivindican el pasado artesanal de la capital y el ingenio de los creadores emergentes. Un lugar perfecto para empezar esta peregrinación al volante del híbrido Ford Puma. Con el Ford Co-Pilot360, un conjunto de tecnologías de asistencia, la conducción por estas calles de pasado árabe se hace fácil y segura. El control de crucero adaptativo ajusta nuestra velocidad y mantiene la distancia adecuada con el coche de delante e incluso puede llegar a pararse. Al mismo tiempo, el asistente de frenada de emergencia, que emplea un radar y un cámara en caso de colisión inminente, ofrece una mayor agilidad de respuesta en la dirección ante obstáculos inesperados. 

Llegamos así a Sebastian Melmoth (Carrer de Baix, 50), un museo de objetos venidos de todas las partes del mundo, en donde también tiene cabida conciertos, exposiciones o presentaciones. Su apuesta por el ingenio valenciano se aprecia en piezas de cerámica de Canoa Lab o los cuadernos de Of Note. Muy próxima, está la tienda del diseñador Jorge Vento, Santo Spirito Vintage (Carrer de Dalt, 22), con una selección de ropa vintage de carácter deportivo y camisetas de diseño propio, que pilotan entre la cultura urbana y el gusto por los logos falsos. Aquí precisamente se encuentra la camiseta viral ‘Balenciana’, un diseño paródico de Álvaro Martinez que acercaba el orgullo de la terreta a la mismísima alta costura. En frente de la Catedral de Valencia encontramos otro imprescindible: Simple (Carrer del Palau, 5). Su dueño Javier Ferrer parece tener un objetivo muy claro: hacer frente a las tendencias pasajeras, para ofrecer objetos reales y únicos, piezas que profundizan en la artesanía y en la creación.

Vintage en Ciutat Vella

Las calles que desembocan en el icónico Mercado Central, están repletas de tiendas vintage en donde exclusividad y sostenibilidad van de la mano. Studio Vintage (Carrer de la Purísima, 8) es conocido como ‘el anticuario honrado’, un espacio concebido como una galería de arte en el que exponen, a la espera de una nuevo dueño, una cuidada selección de muebles y rarezas de los años 30 hasta los 80. Muy próxima se ubica Needles and Pins Vintage (Carrer d’En Bou, 3), una de las preferidas de las influencers. Bajo el lema «amor y respeto», esta boutique mezcla una selección de prendas vintage con otras hechas a mano a partir de telas antiguas. También el Mercado de la Tapinería (Carrer de la Tapinería, 5) se ha convertido en un dinamizador cultural de la zona que insiste en una forma de consumo más sensata. Este espacio efímero varía semanalmente su temática: puede ser desde una feria de anticuarios a una pop up de nuevos creadores. De algún modo, su filosofía encaja a la perfección con la nueva generación de vehículos híbridos. Porque el Ford Puma también luce la etiqueta ‘eco’ por bandera, gracias a sus innovadores motores híbridos EcoBoost, mucho más eficientes y limpios. Combinan un motor eléctrico, con una batería de 48 V, que da soporte al de gasolina, mejorando la eficiencia del combustible y reduciendo las emisiones. Además, no necesita recargarse externamente, sino que se alimenta durante la conducción. Los frenos regenerativos recuperan la energía, que de otro modo se perdería, para recargarla.

Talleres de nuevos creadores

Los diseñadores más interesantes del momento tienen su sede en Valencia. Desconocemos el motivo, quizá sea por su pasado creativo o por la luz que baña la ciudad, la misma que se cuela por el techo panorámico del nuevo Ford Puma mientras paseamos sin un rumbo fijo por el centro de la ciudad. Hay tantas cosas que ver y en las que inspirarse: la fachada modernista del Mercado Central, la Lonja de la Seda y sus detalles góticos, la catedral de Santa María… Un poco antes de llegar al Ensanche, encontramos la boutique del sombrerero prodigioso, Betto García (Carrer del Gravador Esteve, 23). El estudio del sombrerero de Palomo Spain es tan mágico y caótico como sus creaciones: plumas, flores, retales… y una intención férrea de salvaguardar el oficio artesanal. Al otro lado del Ensanche, está otro hervidero de talento: Estudio Savage (Carrer del Pintor Salvador Abril, 19). Gestionado por el diseñador Adrián Salvador y Lucas Zaragosí, su filosofía es una vuelta a la artesanía, bajo un prisma sostenible y contemporáneo. El resultado es un híbrido entre moda y taller, en el que exponen su propia firma de moda y contribuyen al desarrollo comercial de las otras marcas con las que trabajan. 

Invierte por el artista de moda en Ruzafa

Conocido como el Soho valenciano, Ruzafa no solo tiene la oferta nocturna más vibrante de la ciudad, también reivindica su estrecha relación con el diseño y la ilustración. ¿Tenemos que hacer memoria? Mariscal, Paco Roca, Bascuñán… Si queremos conocer a los artistas que le han tomado el relevo la galería Plastic Mur (Carrer de Dénia, 45) es una parada obligatoria; una auténtica lanzadera de nuevo talento, tanto a nivel nacional como internacional. Al nombrar la galería, gracias al sistema de conectividad Ford SYNC 3, que permite al conductor controlar el teléfono, la música y el sistema de navegación a través de la voz, la pantalla táctil del nuevo Ford Puma nos muestra la ruta más rápida para llegar. Muy cerca está también Gnomo (Carrer de Cuba, 32) con sus “piezas imprescindibles para la supervivencia contemporánea». Un almacén de curiosidades con complementos, postales ilustradas, papelería… en el que da gusto perderse. 

Compras de lujo en el Ensache

El Ensanche es la zona comercial por excelencia de Valencia. Allí abrió su puestas en 1987, Chapeau (Carrer de Hernan Cortés, 5), un templo minimal e industrial, en el que Pilar Puchades y Jose Tamarit seleccionan meticulosamente las prendas de las firmas del momento: Balenciaga, Gucci, Céline, Fendi… A su lado, Poppyns (Carrer d’Isabel la Católica, 21) es un espacio multimarca que conquista primero por su increíble arquitectura, y después por su cuidada oferta: moda, libros, decoración, cosmética… Subiendo la Gran Vía está Vestidor Vintage (Gran Via de les Germanies, 14), un paraíso de tesoros perdidos: un archivo histórico en el que encontrar prendas firmadas por Chanel o Alexander McQueen. Lo difícil en estos tres casos es no llevarse nada. Lo bueno, que en el maletero de Ford Puma hay espacio para todo. Incluye un compartimento de carga inferior llamado MegaBox que ofrece un espacio adicional de 81 litros y permite cargar artículos de hasta 115 cm de altura. Además, con el portón opcional automático, guardamos nuestras compras sin tener que hacer equilibrismos.

Hibridación literaria en el Cabanyal

Ponemos rumbo a nuestro último destino: el Cabanyal, el antiguo barrio de pescadores, con sus pequeñas casas de colores y una oferta comercial que hibrida ocio y cultura. Aparcamos con el sistema de aparcamiento asistido de Ford Puma, que identifica los sitios libres de aparcamiento y de forma automática nos conduce hacia él, realizando las maniobras necesarias. Muy cerca de la Fábrica de Hielo, el centro se ha convertido en un gran agitador cultural, la Batisfera (Carrer de la reina, 167) aúna dos hemisferios en un mismo espacio: una librería que apuesta por ediciones independientes y un espacio gastro para terminar el día tomando algo cerca del mar.