Cómo el ante se convirtió en la segunda piel de esta temporada

Gracias al revival del boho chic que impera estos días –de la estética setentas que se esconde el éxito rotundo de la serie Daisy Jones & The Six a la colección de debut de Chemena Kamali para Chloé), el ante acapara, sin miramientos, la palestra otoñal de este 2024. Y en todas sus pieles.

Del aterciopelado nobuk a la aspereza del serraje, o la levedad de la antelina, no hay discusión alguna: esta piel suave y curtida nos vestirá de pies a cabeza. Así lo dictamina el italiano Sabato De Sarno en la colección resort de Gucci para la próxima primavera, con una totalidad de looks que parecen homenajear a la cantante de Jefferson Airplane, Grace Slick, o al reciente fenómeno desatado por la británica Suki Waterhouse sobre un escenario. Esta piel tostada aparece en solitario sobre capas psicodélicas, trajes y pichis con una lazada metálica recién salida de Woodstock, pero con la pulcritud que destila De Sarno en cada puntada.

El calado retro se prolonga en la visión otoñal de la mujer de Miuccia Prada para Miu Miu este 2024. Una colección que viaja hasta su niñez entre los años 50 y 60 tanto en las propias siluetas como en esa manera infantil de abrocharlas. Junto a un falso borreguillo que imita pieles preciosas en abrigos cortos, faldas lápiz e infinidad de complementos, Miuccia mezcla este tejido pseudoanimal de forma magistral con prendas de seda y popelín y medias en colores vibrantes. Ese uniforme en el que querríamos vivir todo el invierno.

Pero si existe una fuente de inspiración para saber cómo llevar el ante este 2024, esa es la calle. El street style ha creado un ideario no oficial de cómo trasladar su pasado vintage a un plano actual, protagonizado por prendas y accesorios que se mueven con soltura desde la tienda de segunda mano hasta el lujo más deseado.

1. La omnipresente chaqueta de flecos

Esta prenda rescatada de alguna tienda de segunda mano del parisino Le Marais, eclipsa a la calle desde el otoño pasado. Su regusto del Lejano Oeste casa a la perfección con el regreso de ese estilo bohemio que reinó en los 2000, parejo de bolsos de estilo vintage y pañuelos a la cabeza. Veinte años después, se lleva con alguna talla de más, bien curtida y como herramienta para crear un layering muy pro con camisas y faldas tipo lápiz.

2. Total look

Las tendencias en bloque dominan la temporada, ya sea en color granate o con el uso de un único material como cuero o ante. Esta piel suave y adobada se adhiere a cualquier silueta; será ese traje de pernera infinita para ir al trabajo, ese vestido con chaqueta a juego cuando caiga la noche o un mono de workwear multiusos.

3. La chaqueta ‘boyfriend’

Nadie discute la hegemonía de la chaqueta con flecos, pero esta otra prenda de abrigo, que parece robada del armario de nuestro chico (o padre), no se queda lejos. También de aspecto vintage y proporciones generosas, encaja en cualquier estilismo, ya sea junto a un vaquero (boyfriend también), leggings para acompañarnos al gimnasio o junto un cinturón para un momento más sofisticado. Hay que tenerla sí o sí.

4. Sin miedo al color

El color tostado o miel tan característico del ante no es la única manera de lucirlo. Una explosión de tonos rosas –del coral al maquillaje, o incluso fucsia– hace que le perdamos al miedo, junto a una llamativa presencia de colores claros como el marfil o el amarillo pastel.

5. El trench soñado de los 70s

Esta prenda tan idolatrada por musas de estilo como Alexa Chung –la británica creó su propio diseño para su línea homónima de moda– es reconocible por las amplias solapas, la hilera de botones y en ocasiones un cinturón que remarca su cintura afilada. Una prenda clave de los años 70 que nos traslada a las aulas de la película Love Story.

6. Las dos caras de una falda

Mini versus midi. La pasada colección de Miu Miu es la culpable del apogeo de la primera silueta, que desprende un aire estudiantil junto a polos y zapatillas de deporte. En la otra cara, los años setenta, que defienden una versión hasta los tobillos junto a prendas de cuero.

7. Bolsos: con logo y shoppings bags

Esta temporada no hay marca que no se sienta atraída por estampar su rúbrica o logo sobre el suave tacto del ante. Las siluetas son infinitas; desde maxibolsos al hombro a carteras o micro satchel, bolsas de fin de semana y shoppings bags.

8. Mosqueteras, la bota de ante por excelencia

Otro guiño a la estética western que hicieron suya los años 70 o más recientemente la diseñadora Isabel Marant. Con o sin flecos, planas o de tacón, siempre van de la mano de minifaldas y bolsos con doble asa.

9. Botines vs. mocasines

El botín de de serraje ya es todo un básico de cualquier armario urbano. Los mocasines de nobuk también. ¿Por qué quedarnos con unos solo y combinarlos mejor con faldas de diferentes largos? Eso sí, siempre en la misma gama de tonos tierra.

10. La sneaker más buscada

La exitosa colaboración entre New Balance y Miu Miu (en la imagen) que casi siempre está agotada es la responsable del furor que causan en el street style las zapatillas de ante. Su horma de retro running conviven con diferentes colores, tanto en la cobertura como en los cordones.

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