Margaret Qualley, una ‘it girl’ para la HBO

Tiene la delicada elegancia corporal de una bailarina clásica, probó a desfilar por la pasarela y hasta posó para el objetivo de Karl Lagerfeld, pero Margaret Qualley sabía que necesitaba algo más. Solo tiene 19 años, pero ya ha conseguido que la crítica no le quite los ojos de encima por su sufrido papel de adolescente perdida en el nuevo orden mundial que dibuja The Leftovers, la serie de la HBO que emite Canal+ basada en la novela de Tom Perrota y producida por Damon Lindelof. 

Criada entre caballos en una finca de Montana, Qualley puede presumir de una genética envidiable: su madre es la exquisita Andie McDowell y su padre es el exmodelo Paul Qualley, aquel con el que la inolvidable estrella de Cuatro Bodas y un funeral protagonizó una campaña de Gap que parecía salida de ese rancho donde después verían crecer a sus tres hijos: Justin, Rainey y Margaret.

Qualley, en una escena de ‘The Leftovers’.

Cordon Press

Rainey, la mediana, se debate entre la actuación y la música. Apareció con su madre en Mighty Fine, protagonizó un romance indie (Falcon Song) y hasta fue Miss Golden Globe 2012, ese título algo desfasado que ostentan los hijos de actores encargados de dar premios en la ceremonia. Ahora vive a caballo entre Los Ángeles y Nashville, donde prepara su asalto a las listas de éxitos country. Lo de benjamina iba por otros derroteros.

Tras haber pasado su niñez bailando clásico e invirtiendo los veranos con el American Ballet Theatre, la pequeña Qualley lo dejó todo cuando recibió una oferta del North Carolina Dance Theatre y que hubiese supuesto su expansión profesional definitiva. Dejó la danza y apostó por la actuación. Tenía 16 años, vivía en Nueva York y se apuntó en la Professional's Children School, donde también estudiaron Scarlett Johansson o Sarah Jessica Parker y pasó por la London’s Royal Academy Of Dramatic Arts. La ficharon para la agencia de modelos IMG. Desfiló para la firma Philosopy y protagonizó una campaña para Maison Michel repleta de 'it-girls' como Sky Ferreira o Lindsey Wixson bajo el objetivo del Káiser de la moda.

Con su madre, Andie McDowell en el festival de Cannes en 2012.

Corbis

El paso definitivo llegaría al mudarse a Los Ángeles con su madre: consiguió que Gia Coppola le echase el ojo para un pequeño papel en Palo Alto, la adaptación cinematográfica de la novela de James Franco repleta de una nueva generación de 'hijos de' hollywoodienses. Y de ahí a The Leftovers. Aterrizar en una de las apuestas más ambiciosas de la HBO le ha valido un pasaporte directo a protagonizar editoriales y entrevistas para Harper's Bazaar, Vogue, Nylon o Vanity Fair.

Ahora que se ha ganado a la crítica por su retrato de la angustia adolescente, su incursión definitiva en el cine llegará acompañada por tres perfiles masculinos de los más dispares pero igualmente idolatrados: Ryan Gosling, Matt Bomer y Russell Crowe. Junto a ellos protagonizará The Nice Guy, un drama policial dirigido por Shane Black (Arma Letal) ambientado en los 70 y en el que se investiga el asesinato de una estrella del porno. No deberíamos perderla de vista, por algo su presencia ya es de lo más requerida en los front rows de la moda o photocall que se precie. Llega para quedarse.

Fotografiada por Karl Lagerfeld para una campaña de Maison Michel en 2012.

Maison Michel

Con Gigi Hadid en el desfile de Prabal Gurung y con Nat Wolff en la premiere de ‘Bajo la misma estrella’ en Nueva York.

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