Billie Eilish vuelve a ser sexualizada y avergonzada por su cuerpo tras aparecer en camiseta de tirantes

El pasado mes de mayo, Billie Eilish, la última megaestrella millennial, presentó un cortometraje en el que, bajo el título Not My Responsibility (No es mi responsabilidad), denunciaba el body shaming (avergonzar a alguien por su cuerpo) al que había sido sometida. En él la joven artista, que cumplió 18 años el pasado diciembre, se desnudaba lentamente antes de sumergirse completamente en unas aguas negras. Mientras tanto planteaba una serie de interrogantes sobre lo que la gente opina sobre su cuerpo. “¿Te gustaria que fuera más pequeña? ¿Más débil? ¿Más suave? ¿Más alta? ¿Te gustaría callarme? ¿Mis hombros te provocan?”. El lanzamiento llegaba meses después de que, a pesar de su empeño por ocultar su figura con su característica ropa ancha para evitar ser sexualizada y juzagada por su físico, fuera víctima de comentarios machistas y críticas en Twitter tras aparecer luciendo una ajustada camiseta de tirantes.

De nuevo la intérprete de Bad Guy, que la semana pasada se llevó tres de los premios más importantes en los Billboard Music Awards (mejor álbum, mejor artista revelación y mejor artista femenina), vuelve a ser blanco de faltas de respeto en redes sociales por el mismo motivo. Eilish se dejó ver hace unos días ataviada con una camiseta básica de tirantes en tono tierra –que dejaba ver ligeramente su sujetador– a juego con unos pantalones cortos deportivos. La aparición no tardó en ser comentada en el patio de Twitter despertando críticas e insultos hacia su cuerpo. «¡Esto es inaceptable! por favor cubre su feo y gordo cuerpo! Me gustaba más cuando tenías las tetas grandes y jugosas, ¡pero ahora te ves tan gorda como un camión! ¡Arréglate!” es solo uno de los ejemplos que ilustran el odio del que ha sido víctima.

Además del apoyo de muchos de sus fans, que no han tardado en defender su figura subrayando su influencia en la música y la nula necesidad de juzgar su apariencia, ella misma ha salido al paso compartiendo en sus Stories de Instagram un vídeo de Tik Tok grabado por la youtuber Chizi Duru titulado “¿Podemos normalizar todo tipo de cuerpos?”. En él defiende la variedad de tallas apelando a cómo las redes sociales están influyendo en crear una idea sobre la supuesta perfección física que no se corresponde con la realidad. “No todo el mundo tiene un culo gigante a sus espaldas, ¿vale? Los michelines son normales. Son normales. Los pechos se caen… Especialmente después de amamantar. ¡Instagram no es real!”, afirma Duru en el vídeo. Un alegato del que se ha apropiado la cantante para, de forma sutil, contestar a todos aquellos que la han juzgado por su aspecto.

Ella misma lo decía alto y claro en el corto del que hablábamos al principio del artículo. “Hacemos suposiciones sobre las personas por su talla. Decidimos quiénes son. Decidimos cuánto valen. Si llevo más o menos ropa, ¿quién decide en lo que me convierte, ¿qué significa? ¿Mi valor como persona se fundamenta en tu percepción? ¿O en tu opinión sobre mí? No es mi responsabilidad”.