Bianca Censori posa desnuda en los Grammy: el turbio papel de Kanye West en sus relaciones vuelve al debate

Todo marchaba con total normalidad en la alfombra roja de los premios Grammy, celebrada anoche en Los Ángeles. Lo más destacado de la industria musical posaba para los fotógrafos, entre mensajes solidarios para los afectados por los incendios que han destruido por completos varios barrios de la ciudad y han dejado 25 víctimas mortales. De pronto ha aparecido Kanye West con su actual mujer, Bianca Censori, una modelo y arquitecta australiana de 30 años con la que lleva tiempo paseándose por eventos públicos. La pareja ha entrado completamente vestida de negro hasta que Bianca Censori se ha retirado el abrigo y ha mostrado su cuerpo desnudo para sorpresa de todos los presentes.

Poco se puede comentar de la elección de Bianca Censori en términos de moda. Parece que la modelo habría usado una media transparente y algún áposito del tono de la piel para tapar una pequeña zona de la vulva.

La pareja no se quedó a ver la gala y salió del recinto a los pocos minutos de haber llegado, dejando claro que la única intención era dar un golpe de efecto, llamar la atención y convertirse en tema de conversación. Algo que claramente han conseguido. Aunque algunos medios internacionales han publicado que fue la organización quien les invitó a marcharse (pero no hay confirmación de que la pareja se viera obligada a irse), el rapero cumplió su propósito: justo cuando la imagen daba la vuelta a internet, Yeezy, su marca, lanzaba una nueva colección a través de un spot publicitario.

Las imágenes han despertado mucho debate sobre si la aparición de la pareja es una completa humillación de él sobre ella. Llama especialmente la atención que mientras Kanye West posa completamente tapado es su mujer la que posa desnuda, lo que ha sido interpretado como un acto misógino por parte del rapero, que no participa de la extraña performance más que para caminar al lado de su mujer desnuda.

Esta no es la primera vez que la aparición de la pareja provoca controversia, aunque sí la que más han llevado al extremo su imagen. Bianca Censori lleva meses acudiendo junto a Kanye West a eventos públicos cada vez con menos ropa, dejando una estela un tanto perturbadora en cada una de sus apariciones. En junio, la pareja acudió al desfile de Prototypes y también se vio a Kanye West completamente tapado, incluso su cara, mientras que ella lucía un body completamente transparente que simulaba un cuerpo desnudo.

También repitieron el mismo patrón en la semana de la moda de Milán, donde Kanye West solo dejó su cara al descubierto mientras Censori veía el desfile de Marni con un mini body de cuero negro que dejaba ver parte de sus pechos.

En un artículo de S Moda publicado en 2022 se analizaba cómo Kanye West ejerce un control obsesivo sobre la imagen de sus parejas. Lo hizo con su exmujer Kim Kardashian, con la que tuvo cuatro hijos. En un episodio del reality de las Kardashian, los espectadores fueron testigos de cómo el rapero le pedía a Kim que tirara absolutamente toda su ropa, para luego traerle dos burros con prendas nuevas y cambiarle por completo su imagen. “La secuencia duraba poco más de tres minutos. Suficiente como para comprender que más que redescubrir la individualidad de su novia, aquel vídeo pasaría a la historia como práctica prueba número uno de cómo Kanye West lleva una década borrando a sus mujeres”, escribía entonces Noelia Ramírez.

“No soy su Barbie”, aseguraba Amber Rose en una entrevista a la revista Elle en la que hablaba sobre el rapero, de quien ha dicho que le hizo bullying tras romper la relación. Sonados también fueron los excéntricos estilismos de supervillanos y sus consecuentes impactos publicitarios que Kanye West y otra de sus exparejas, Julia Fox, pasearon durante meses por las semanas de la moda. De hecho, durante su brevísima relación, Fox acabó siendo imagen de Diesel, marca que vistieron en casi todas sus apariciones públicas y cuyo dueño, Renzo Rosso, es amigo personal del rapero. Fox aseguró tras separarse del artista que se arrepentía de esa relación y que sentía que fue “utilizada como un peón”.

Cuando Kanye West contrajo matrimonio con Bianca Censori, la pareja llevaba cuatro años trabajando juntos. La arquitecta australiana era una de las jefas de diseño de Yeezy y formaba parte de su círculo creativo de confianza (hoy el director creativo de la marca es el ruso Gosha Rubchinskiy, hasta hace poco desterrado de los círculos creativos por sus acusaciones de acoso a modelos jóvenes). Lo cierto es que Censori, que guarda un sorprendente parecido físico con Kim Kardashian, siempre ha tenido predilección por las prendas transparentes y provocativas, pero desde que formalizó su relación con el artista, solo lleva prendas diseñadas por Yeezy, convirtiéndose en una especie de embajadora de la firma y haciendo de cada una de sus pariciones públicas una especie de performance. “Bianca tiene mucho que decir en lo que respecta a lo que se pone. Todo lo que luce sale de su cerebro y el de Ye. Quieren mostrar a la gente que te lo puedes hacer tú mismo, porque son elementos accesibles para todo el mundo, como cortar unas medias”, contaba en una ocasión la diseñadora Mowalola, antigua directora creativa de la colección de Yeezy y GAP, sobre los perturbadores atuendos de su excompañera.

Mientras a Ye le ha dado por aparecer con la cara tapada y los pies descalzos (y eso que hizo fortuna diseñando zapatillas para Adidas durante años) ella ha hecho de los bodies color carne su prenda básica, borrando las fronteras entre el cuerpo desnudo y el vestido y jugando el rol de pareja provocadora, como unos Jeef Koons y Cicciolina modernos. Algunos medios apuntan a que la pareja se está acercando al nudismo como forma de “liberación emocional”, pero la realidad es que, públicamente, West no deja ver un ápice de su cuerpo. Ahora queda por ver si Censori terminará o no hablando sobre el impacto que estas extrañas performances tendrán en su salud mental presente y futura.