Soap & Glory, el hit de la cosmética londinense que vende 36 productos cada minuto

Hay quien viaja a Londres para conocer la historia del ser humano a través de las salas del Brisith Museum y otros disfrutan del ritual del té de la tarde con scones, whipped cream y sándwiches de pepino. Hay a quien no se resiste a adquirir un paraguas en la tienda James Smith & Sons y los que no perdonan entrar en las farmacias de la cadena Boots para hacerse con alguno de los geles, cremas o exfoliantes imposibles de encontrar en España, como los de Soap & Glory. Al menos hasta la fecha, porque la marca popular que es un hit en Inglaterra está ya disponible en nuestro país.

Su estética parece retro, ya que sucumbe al encanto de décadas pasadas, pero los productos no lo son, porque la firma londinense nació en 2006. Su distintivo packaging se inspira en los llamativos titulares de los periódicos británicos de los años 50. Aunque si por algo se conoce a sus geles, peelings e hidratantes para el cuerpo es por los envolventes aromas de sus productos corporales, a los que les llueven las críticas positivas en internet. “Me encanta, en especial su olor particular a cascara de mandarina. Yo me lo volvería a comprar. Es un producto de calidad”, comenta una usuaria de Amazon sobre el gel Clean on me. “La mejor para pieles muy secas, y eso que yo he probado muchísimas. Huele a gloria. La recomiendo 100%. Es una maravilla. Además, no es muy cara”, escribe otra usuaria sobre la manteca para el cuerpo The Righteous.

Con el rosa como color dominante en la marca, Soap & Glory ofrece cuatro colecciones según sus fragancias e ingredientes: Original Pink es el icono de la casa y se reconoce por su aroma floral-afrutado con notas de rosa y bergamota y un toque cítrico. “Lleva aceite de rosa mosqueta que ayuda a mejorar la elasticidad de la piel y a nutrirla, aceite de almendras dulces y macadamia que hidratan, equilibran el pH y protegen del envejecimiento prematuro, manteca de karité que ayuda a reducir estrías y vitamina E que promueve la regeneración celular”, desvela Andrea Ramell, product manager de la firma. Pero además de su emblemática línea, la firma tiene otras tres colecciones: Call of Fruity, con notas de melón y gardenia fresca; Magnifi-coco, con aroma a coco y manzana verde y Sugar Crush, con ingredientes energizantes y estimulantes, tiene una fragancia cítrica con notas de lima y azúcar moreno.

Busca hacer de las rutinas cotidianas de autocuidado un momento muy placentero con un ADN británico que queda patente en el humor característico de la idiosincrasia del país con el que se han bautizado sus productos. Los cosméticos llevan nombres en los que el ingenio prima, como Sexy mother pucker, Glow job o Pulp friction y le hacen ganar puntos entre sus consumidoras. “Con su tono comunicativo diferente, aspecto distintivo y formulaciones realmente buenas, Soap & Glory ha sabido conectar con sus consumidores alrededor del mundo y crear una comunidad de fans”, asegura Ramell.

Con 14 años de historia, la marca es una revolución en su país de origen y las cifras lo corroboran. Tiene más de 2,7 millones de seguidores en redes sociales, más de 100 premios ganados y esta institución de la belleza brit presume de vender 36 productos cada minuto. De su catálogo, los tres best sellers pertenecen a la línea Original Pink: “Los más vendidos son el cremoso gel de baño Clean on Me, que aporta una hidratación extra en la rutina de limpieza, la manteca corporal The Righteous Butter, que deja la piel súper hidratada hasta 72 horas y el exfoliante corporal Flake Away, un producto del que se ha declarado fan Gwyneth Paltrow y que deja una piel resplandeciente y suave”, detalla Ramell. El producto que ha enganchado a la actriz se aplica como cualquier exfoliante: con un masaje sobre la piel húmeda y se aclara fácilmente con agua tibia. La diferencia con los demás es el aroma que deja y su precio difícil de igualar: 6,90 euros.

Detrás está la emprendedora Marcia Kilgore, que se ha hecho un nombre en la industria cosmética por su capacidad para crear marcas de belleza. De las conversaciones con sus clientes mientras trabajaba como facialista en Nueva York tuvo la idea de lanzar Bliss, la línea de cuidado de la piel de gran éxito conocida por sus productos kitsch similares a los de un spa y que vendió en 2004 por 25 millones de dólares. Su última empresa de belleza se conoce con el nombre de Beauty Pie y ofrece productos de lujo sin sobreprecios. Y entre ambos lanzamientos, coincidiendo con su estancia en Londres, decidió juntar la popularidad de los tabloides británicos con cosmética asequible centrada en baño y cuerpo y fundó Soap & Glory, que está disponible en España a través de Druni, Primor, Maquillalia y perfumerías independientes.