Esta es la edad a la que debes empezar a usar contorno de ojos (todos los expertos coinciden)

Empecemos por el principio: un contorno de ojos no es un corrector ni un antiojeras. No sirve para camuflar de un plumazo rojeces, manchas y granitos -como sí hace el corrector- ni tampoco para hacer lo propio en la zona de las bolsas y zonas oscuras bajo los ojos -que es el caso del antiojeras-. Se trata, por el contrario, de un producto de tratamiento idéntico a los que utilizamos en el resto de la cara, pero específico y especialmente formulado para la zona más delicada de nuestro cuerpo.

“La piel de alrededor del área del contorno de los ojos es extremadamente delgada, como un ala de mariposa. Por lo tanto, debe tratarse de forma independiente al resto del rostro”, advierte Jane Foulston, directora de la firma cosmética británica Emma Hardie. Es, de hecho, cinco veces más fina que la del resto de la cara y hasta diez veces más que la de otras partes del cuerpo. Y hay más: es la que más movemos al expresarnos y al hablar (sí, incluso más que la zona que rodea nuestros labios).

¿Por qué es imprescindible?

Esto se traduce en varios hándicaps que condicionan los cuidados del área de los ojos:

1. Se convierte en una de las zonas más activas y castigadas porque los músculos de los ojos se mueven sin cesar. De base, nada más y nada menos que entre 11.000 y 15.000 veces al día (que son las que, de media, parpadeamos). Añadido: cada vez que guiñamos los ojos, entornamos la mirada, los entrecerramos ante el efecto del sol o el aire, los frotamos cuando tenemos sueño o, simplemente, los movemos para mirar algo. Los músculos que lo permiten -llamados periorbitales- son 22 en total y no solo sufren con cada una de estas acciones, sino que además lo delatan a través, precisamente, de arrugas, ojeras, bolsas o hinchazón.

2. Su pH es especial, así que una crema normal puede causar daños: «El pH del lagrimal es de un 7, mientras que el del resto del rostro está en torno a un 5,5. Si se utiliza la misma crema en la cara que en el contorno, puede ser habitual que se produzcan alergias e irritaciones», afirma Sonia Márquez, de Laboratorios Fridda Dorsch + Farma Dorsch, a S Moda.

3. Apenas cuenta con las glándulas sebáceas presentes en el resto del rostro cuya función es sintetizar el sebo para hidratar y proteger la superficie de la piel. Esta zona, por tanto, resiste peor a las agresiones externas.

4. Con la edad, también se reduce la presencia de colágeno en la zona, por lo que esa piel se convierte en la más propensa a arrugarse, oscurecerse y descolgarse. El colágeno es la proteína estructural más abundante en nuestro cuerpo y se encarga de formar fibras y crear estructuras para mantener unidos los tejidos haciendo que sean sólidos y resistentes. Sus funciones pueden resumirse en 5 puntos esenciales -hidratación, volumen, elasticidad, firmeza y resistencia- que menguan con el paso del tiempo.

5. Al tener menos capas, se encuentra más expuesta que cualquier otra a los rayos UV y es propensa a la hiperpigmentación. «Es importante utilizar gafas de sol con SPF e incluir esta zona a la hora de aplicar el protector solar», recomienda el Dr. Timm Golueke, dermatólogo y creador de Royal Fern.

6. También es la zona que más refleja el cansancio. Lo hace porque la microcirculación sanguínea y linfática alrededor de los ojos es más lenta que en el resto del cuerpo. Y, al ser la piel tan fina, deja que se vean fácilmente las marcas y signos de cansancio. «Un contorno de ojos debe contener activos específicos que faciliten el riego sanguíneo. Es fundamental que lleve activos descongestionantes y anti-inflamatorios para combatir ojeras y arrugas», advierte Sonia Márquez.

¿Desde qué edad se recomienda utilizarlo?

Si utilizamos crema hidratante en la cara y en el resto del cuerpo, también debemos hacerlo en esta área que requiere un cuidado especial. Y es que un contorno de ojos no solo actúa previniendo el envejecimiento, sino también cuidando una zona con características únicas.

Todos los expertos coinciden. “Conviene comenzar a utilizarlo alrededor de los 25-28 años: ahí es cuando el metabolismo tiende a ralentizarse y la piel comienza a perder tonicidad”, explica Jane Foulston a S Moda. Aunque muchos también puntualizan que el momento preciso para incorporar el contorno de ojos a la rutina de belleza depende de cada mujer: los primeros signos de expresión marcarán el punto de inflexión. «También de los hombres» -añade el Dr. Gouleke- «Es aquí donde aparecen las primeras arrugas».

Y hay más: según Márquez, «el estrés, la mala alimentación, dormir poco y, por supuesto, la luz de las pantallas hacen que esa zona envejezca antes y, muchas veces, son los causantes de bolsas y ojeras, además de la genética», por lo que cada vez necesitaremos incorporarlo siendo más y más jóvenes.

¿Cómo debe aplicarse?

Tan vital como su uso es el modo de aplicarlo. No vale de cualquier forma… Y, lo que es peor, la forma más extendida de hacerlo -untándolo como una crema al uso sobre los párpados- no es la forma correcta de hacerlo y puede, incluso, resultar perjudicial para la piel de la zona. Desde Farma Dorsch nos explican cómo hacerlo:

«El contorno de ojos debe utilizarse diariamente y lo ideal es dos veces al día, después de la limpieza facial, y evitando siempre el contacto con el ojo. Pasos que deberíamos seguir a la hora de aplicarlo:

– Siempre, sobre la zona limpia y seca.

– Aplicar una pequeña cantidad de producto debajo del contorno del ojo, encima del hueso, con los dedos anulares. Siempre se recomienda utilizar estos dedos para no romper los capilares, ya que son los que menos fuerza muscular tienen.

– Hacerlo desde dentro hacia fuera, siguiendo la zona del hueso orbital, con pequeños toques para evitar la retención de líquidos, estimular la piel y reducir las líneas de expresión».

La teoría no es baladí: no solo es la forma más higiénica de aplicarlo para evitar que el producto penetre en los ojos, sino que hacerlo directamente sobre los párpados -tanto superior como inferior- puede llegar a provocar el efecto contrario y aumentar la presencia de hinchazón en la zona. «Si se tiene propensión a la formación de bolsas, se necesitan productos con un porcentaje muy bajo en grasa que ya tiene este área. Pero todas las cremas tienen grasa y pueden incrementar las bolsas si se aplican mal… ¡la zona del contorno tiene la piel muy fina!», aconseja Sonia Márquez.

6 contornos de ojos eficaces por menos de 45 euros

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