El incendio de Estepona, cerca de ser controlado tras arrasar 300 hectáreas

Tras una noche donde las llamas avanzaron casi sin control por Sierra Bermeja, en el término municipal de Estepona (Málaga), el incendio forestal está cerca ya de ser estabilizado. Se espera que ello suceda durante la jornada de mañana. A última hora de la tarde su perímetro era de 12 kilómetros y había afectado a algo más de 300 hectáreas, según ha informado el presidente de la Junta de Andalucía, Juan Manuel Moreno Bonilla, que ha subrayado que aún existen focos activos. Más de 200 personas han seguido durante toda la jornada del martes las tareas de extinción dirigidas por Adriano Vázquez y hasta seis helicópteros han seguido descargando agua en la zona hasta el anochecer. El ciudadano francés detenido como sospechoso de haber iniciado el fuego al intentar quemar con gasolina un avispero pasará mañana a disposición judicial.

El líder del gobierno andaluz también ha indicado que las personas que tuvieron que abandonar por seguridad las urbanizaciones Forest Hills y La Alberdina, ambas en el término municipal de Estepona, han podido comenzar el retorno a sus casas. Muchos de ellos pasaron la noche del lunes en el polideportivo El Carmen, habilitado para ello por el ayuntamiento esteponero. También se alojaron allí los vecinos de 42 diseminados cercanos al fuego, que deberán esperar para volver a sus hogares. En total se han desalojado unas 2.000 personas de casi 400 viviendas, según el servicio de emergencias 112.

El aumento de la humedad, la disminución de la temperatura y el descenso del viento han sido factores que han ayudado a la lucha contra el fuego. Tanto desde tierra, con la labor de los bomberos forestales y maquinaria terrestre, como desde el aire. Hasta 14 medios aéreos, entre hidroaviones y helicópteros, han realizado durante todo el martes constantes descargas de agua tomada del litoral de Estepona, así como de campos de golf, balsas y piscinas de las urbanizaciones cercanas al incendio forestal. “Parece que la peor parte ha pasado”, decía esta tarde el delegado del Gobierno en Andalucía, Lucrecio Fernández, en Cádiz, según las declaraciones recogidas por Europa Press. “Pero no se puede dar por estabilizado porque aún quedan zonas calientes, humeantes o incluso con llamas”, ha advertido Moreno Bonilla, que ha destacado la inexistencia de daños personales causados por el fuego durante su visita al puesto de mando avanzado donde se coordinan las tareas.

A última hora quedaban seis helicópteros trabajando, el medio más efectivo para la extinción en el terreno afectado, según la Junta de Andalucía. El viento y la orografía, con la existencia de numerosos barrancos y vaguadas, han dificultado la labor de los bomberos. Desde el operativo de emergencias se espera que el incendio se pueda dar por controlado mañana, aunque no hay total seguridad debido a las condiciones climatológicas. Los principales esfuerzos se han centrado en dos áreas de contención. La primera, al sur, era la que podía afectar a las viviendas desalojadas. La segunda, al norte, se temía porque si el fuego hubiera seguido ascendiendo la ladera de Sierra Bermeja podría haber llegado al puerto de Peñas Blancas, donde existe un bosque de pinsapos de alto valor ecológico.

La zona afectada es pie de monte conformado por matorral mediterráneo, pino negral y ejemplares de encinas y alcornoques. Buena parte del área quemada y la circundante está declarada Zona de Especial Conservación de la Red Natura 2000 impulsada por la Unión Europea para conservar la biodiversidad. “Es una zona extremadamente singular, con afloraciones de roca peridotita y numerosas plantas, insectos e invertebrados endémicos”, destaca Javier Martos, miembro de Ecologistas en Acción. Desde la organización explican que, aunque el bosque mediterráneo es pirófilo y se regenera después de un incendio, la constante construcción de urbanizaciones y los periódicos incendios “hacen imposible esa regeneración”. “El monte está abandonado a su suerte”, denuncian.

En el incendio siguen trabajando 142 efectivos entre bomberos, técnicos y especialistas en extinción de incendios. Además, se han desplegado cuatro autobombas, una Unidad Móvil de Meteorología y Transmisiones (UMMT), Unidad de Análisis de Incendios Forestales (UNASIF), una Unidad Médica para Incendios Forestales (UMIF) y un dron o vehículo aéreo tripulado de forma remota que ha volado tres veces para ayudar a la dirección de extinción a conocer el perímetro del incendio, además de los 14 medios aéreos. Hay que sumar también una decena de técnicos y agentes de Emergencias Andalucía (GREA, 112 y Protección Civil), patrullas de la Policía Local de Estepona y de la Unidad Adscrita, agentes del Cuerpo Nacional de Policía, dotaciones del Consorcio Provincial de Bomberos de Málaga y voluntarios de Protección Civil de Estepona y Cruz Roja. La Delegación del Gobierno Andaluz en la provincia de Málaga mantiene activo el nivel 1 del Plan de Emergencias por Incendios Forestales en su fase provincial.