Podemos justifica la ‘desaparición’ de Iglesias y alega que el partido es un “proyecto coral y colectivo”

Pablo Iglesias sigue desaparecido. Su último acto se remonta al 20 de diciembre en Valencia con víctimas del franquismo. Desde entonces, el secretario general de Podemos limita su comunicación con el exterior a las redes sociales y a la presentación del programa Fort Apache. Iglesias es el único líder de los principales partidos que no ha comparecido en público para analizar el resultado de la coalición de su partido con los comunes de Ada Colau en las elecciones del 21-D, en las que perdieron tres escaños y 40.000 votos respecto a los comicios catalanes de 2015.

“Cuando los presidentes de los diferentes grupos parlamentarios se habían ido de vacaciones Iglesias estaba presentando en el Congreso la ley de cambio climático [fue el 15 de diciembre]... Podemos es un proyecto colectivo y a veces comparece Iglesias, otras yo o Noelia Vera. No hay más misterio que ese”, ha tratado de restar importancia Pablo Echenique al perfil bajo de Iglesias. El secretario de Organización de Podemos ha dado la cara este miércoles tras la reunión del consejo de coordinación de Podemos. A diferencia del resto de partidos, también fue el primer encuentro de la ejecutiva de Iglesias tras el 21-D. El órgano no se reunía desde el 11 de diciembre. En cambio, las direcciones de PP, Ciudadanos y PSOE-PSC han mantenido varias reuniones desde las elecciones en Cataluña.

La portavoz de Unidos Podemos en el Congreso, Irene Montero, también ha salido en defensa de Iglesias. Pese a su ausencia de la arena política desde hace tres semanas, Montero ha afirmado que el secretario general “no ha dejado de aparecer en ningún momento”. Como alternativa al líder ha defendido el “equipo coral” de representantes de su formación. Incluso se refirió a ellos como un “pool de portavoces”.

El vacío provocado por Iglesias trasciende aún más si se compara con el comportamiento de los dirigentes de los demás partidos mayoritarios. Mariano Rajoy, Pedro Sánchez y Albert Rivera comparecieron el 22 de diciembre y lo han vuelto a hacer posteriormente. Iglesias se reserva hasta la reunión de este sábado del consejo ciudadano estatal, el principal órgano de Podemos entre asambleas, donde presentará un informe sobre cómo ha sido 2017 para el partido y los retos futuros para Podemos en el escenario más complicado en sus cuatro años de vida, con una tendencia a la baja según todas las encuestas.

“El choque de identidades y la cuestión territorial no es un marco favorable para los planteamientos que nosotros tenemos”, reconoció Rafael Mayoral, secretario de Sociedad Civil y Movimiento Popular de Podemos, en el balance que hizo a final de año. Rajoy fue el encargado en el caso del PP, Rivera por Ciudadanos y José Luis Ábalos, secretario de Organización de Sánchez, por el PSOE. “Hasta después de las navidades no vamos a hacer ninguna reunión de órganos de dirección, pero creo que como todo el mundo, ¿no?”, expresó Mayoral, obviando que, al revés que Podemos, las ejecutivas de los demás partidos ya habían pasado por ese proceso.

La "barrera" de los medios

"Los resultados en Cataluña no los habríamos querido tener. Nosotros salimos siempre a ganar; un escenario en el que no se dé pues no cumple nuestras expectativas", ha reconocido Echenique. "Hemos perdido tres escaños y cierto porcentaje de votos pero no es una variación muy grande", ha argumentado el número dos de Podemos sobre los 320.000 votos obtenidos (7,45%). Pese al mal resultado, la coportavoz Noelia Vera ha defendido que la posición de Podemos ha sido la "más sensata en un contexto polarizado". "Entendemos que a medio plazo una posición como la nuestra es la única salida. No parece sensato que cambiemos", ha zanjado. Vera también rechaza que la estrategia del partido en Cataluña pase factura en las elecciones municipales y autonómicas en el resto de territorios. Una perspectiva que, sin embargo, no comparten en otras federaciones.

El responsable de Organización ha achacado a la prensa de parte de los problemas de comunicación de Podemos. "Es enormemente difícil, en un contexto polarizado como la cuestión catalana, conseguir que los mensajes que uno quiere transmitir lleguen a la ciudadanía. No es un trabajo en el que dependa todo de nosotros, también de depende de los profesionales del periodismo, de los temas que interesen legítimamente a los medios de comunicación y también de los otros actores políticos", ha aseverado. "No hemos sabido superar esa barrera de comunicación", ha aseverado Echenique como "autocrítica".

Análisis de José Marcos: ¿Cómo está Podemos? | España