Guía básica para seguir el congreso del PSOE

¿Qué diferencia básica hay entre un congreso ordinario, como este, y uno extraordinario?

Los ordinarios eligen la comisión ejecutiva y una parte del órgano más importante entre congresos, el comité federal (de los 300 miembros se escogen unos 60, y el resto por la designación de las federaciones o partidos autonómicos). Los extraordinarios se celebran, por ejemplo, cuando hay una dimisión de la comisión ejecutiva o del secretario general, como se planteó en el caso de octubre pasado.

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¿Por qué este congreso es ordinario y no extraordinario?

Habría cabido un congreso extraordinario si la Comisión Gestora o el órgano competente lo hubiera convocado o la directiva de Sánchez antes de su dimisión. Lo cierto es que, por el tiempo trascurrido desde el último ordinario, en 2012, ya tocaba celebrar uno ordinario.

¿Qué elementos de este congreso lo hacen distinto de los anteriores?

Los aspectos de organización se suelen debatir en el marco del congreso con una ponencia específica, pero en este caso se relegan a una conferencia posterior específica para debatir la organización, el modelo de partido. Hay un precedente histórico: tras el congreso ordinario polémico del 1979 en el que el partido rechazó retirar la definición marxista del PSOE y el extraordinario de ese mismo año en el que se cambió la representación directa de agrupaciones por la de federaciones, se celebró una conferencia de organización en 1983 en la que se aprobó la existencia de corrientes de opinión.

Desde el punto de vista de la puesta en escena, sorprende la sesión de clausura prevista para este congreso. Siempre ha estado abierta a los afiliados, pero en este caso se ha difundido una convocatoria para lograr un acto multitudinario, una suerte de aclamación final. Tradicionalmente se les permitía la asistencia, pero no había una llamada tan explícita y masiva. Parece responder los nuevos tiempos, a la necesidad de reforzar al candidato y seguir la línea de algunos nuevos partidos, como Podemos.

¿A qué momentos del congreso hay que estar más atentos?

Fundamentalmente a tres: la elección de la mesa del congreso, la elección de los órganos de dirección, y la presentación y votación del a ponencia general (la política) y la económica. Habrá que estar también atentos a la representación internacional, de otros partidos socialistas o afines.

¿En qué consiste la elección de la mesa?

Al inicio del congreso se elige la mesa y su presidencia y secretaría. Aunque la función de esa mesa es organizativa y procedimental, su composición da cuenta de las mayorías y minorías presentes en el partido. En este caso, la ponencia marco se ha retirado y se presenta la alternativa elaborada por el sector de Pedro Sánchez.

¿En qué consiste la elección de los órganos de dirección?

En realidad, aunque haya sido elegido en primarias Pedro Sánchez, cabe que en el congreso se presente, aunque no va a ser el caso, una lista alternativa. Históricamente se podrían presentar varias listas para la Ejecutiva, o una abierta donde se escogía de manera individual los cargos. Hoy no se vota individualmente a los candidatos, sino a la lista en su conjunto.

La lista para la Ejecutiva suele estar compuesta de algo más de 30 miembros, aunque por su dimensión la responsabilidad cotidiana recae en una Comisión permanente formada por los cargos principales de esa Ejecutiva.

Es interesante comprobar cómo, con la instauración del Estado de las autonomías, un partido que era un bloque ve cómo su Ejecutiva se convierte en un órgano de representación territorial. A partir de los años noventa, con la disputa entre guerristas y renovadores, los barones territoriales ganaron mucha representación. Esa territorialidad parece que ahora va a quedar desdibujada para que el partido no se asemeja tanto a un racimo de uvas como a los gajos de la naranja.

¿Se votan por separado las ponencias general y económica?

Sí, y además cabe la posibilidad de presentar varias. De hecho, hay un precedente, de 1979, en el que la ponencia política, defendida por Joaquín Almunia, fue derrotada frente a la que presentó Francisco Bustelo.

¿Ha variado la función de los congresos ordinarios a lo largo de la historia democrática reciente?

Sí. Por ejemplo, en la historia del PSOE, en el exilio y a principios de la Transición, cada agrupación podía mandar propuestas o enmiendas concretas en diversos ámbitos (política, organización, internacional). Desde los años 80, hay una ponencia marco general, una económica y a veces una de organización. Sobre esta ponencia marco se pueden aprobar enmiendas en las agrupaciones y en los congresillos previos de las federaciones o partidos regionales. Si una enmienda obtiene el 20% en comisión es debatida en pleno.

Con el asesoramiento de Abdón Mateos, catedrático de Historia contemporánea de la UNED, director del Centro de Investigaciones Históricas de la Democracia Española (CIHDE) y autor del libro Historia del PSOE en transición. De la renovación a la crisis (Sílex, 2017).