Un detenido por la muerte del joven agredido al mediar en una pelea
La policía busca en Málaga a un segundo sospechoso del homicidio y arresta a otras dos personas por encubrimiento
Un hombre de 25 años ha sido detenido la tarde de este lunes como presunto autor del homicidio del joven que falleció este fin de semana tras ser agredido supuestamente al intentar mediar en una pelea en la puerta de un bar de copas de Málaga. La víctima tenía 22 años y sufrió el ataque mortal la madrugada del viernes, mientras celebraba su cumpleaños con unos amigos. El arrestado es de nacionalidad española, según ha informado la policía, que busca a un segundo sospechoso al que también considera autor material de la muerte.
El Grupo de Homicidios del Cuerpo Nacional de Policía tenía identificados a los dos presuntos responsables de la agresión desde este domingo. Las cámaras de seguridad instaladas en los negocios de esta zona de marcha del centro de Málaga han ayudado en las pesquisas, que han avanzado también gracias al testimonio de los testigos del crimen. El propio subdelegado del Gobierno en Málaga, Miguel Briones, explicaba este lunes por la mañana que se conocía la identidad de los posibles autores. En ese momento se encontraban en paradero desconocido, aunque la policía trabajaba para precipitar su arresto lo antes posible.
Al hilo de esto, en el transcurso de la investigación han sido detenidas otras dos personas, dos varones de 30 y 21 años, por un supuesto delito de encubrimiento que han quedado en libertad con cargos. Los agentes continúan ahora las pesquisas para localizar y detener al segundo sospechoso como autor material de la agresión.
La víctima, de nombre Pablo P., quedó en estado de muerte cerebral mientras intentaba mediar en una pelea en la puerta de un bar de copas de la calle Lazcano de la capital malagueña. Los hechos ocurrieron sobre las cuatro de la madrugada del viernes. El chico ingresó en la Unidad de
Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital Clínico Universitario en estado crítico y falleció al día siguiente, después de que su familia autorizara la donación de sus órganos.
El joven había salido con un grupo de amigos para celebrar su cumpleaños. En un momento determinado de la noche, salió a la puerta del pub con uno de ellos y ambos se toparon con una fuerte discusión entre otros dos jóvenes en la que incluso se había llegado a las manos. La víctima intentó supuestamente calmar la reyerta y separar a sus protagonistas, que se habrían revuelto contra él y le agredieron, según la investigación. Recibió una patada y un puñetazo en la cabeza e ingresó en el hospital con un traumatismo craneoencefálico severo y en estado de muerte cerebral. El funeral por Pablo P. se celebró ayer domingo en el cementerio de Málaga.
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