El PP desprecia la marcha de apoyo a Mas: “Eran, sobre todo, cargos públicos”
"La vida de los ciudadanos no se paraliza porque procesen a sus gobernantes", dice la vicepresidenta
El vicesecretario de comunicación del PP, Pablo Casado, ha asegurado este lunes, en la rueda posterior al comité de dirección del partido, que el discurso del "victimismo" de los independentistas no va a calar y ha despreciado la marcha de apoyo a Artur Mas previa al juicio por la consulta soberanista del 9-N. "La manifestación era sobre todo de cargos públicos. La Cataluña real a esa hora estaba trabajando. Comparto plenamente las declaraciones del ministro de Justicia, Rafael Catalá, criticando 'el numerito' de movilizar a funcionarios con fines espurios para intentar intimidar al tribunal, y también las de Xavier García Albiol [líder del PP catalán], que ha señalado la poca valentía de Mas al no responder a las preguntas de la fiscalía.
La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, aseguró que "cumplir la ley es la primera obligación de los gobernantes" y que "la vida de los ciudadanos no se paraliza por los procesos contra ellos". La número dos del Ejecutivo insistió en que el Gobierno va a seguir estando "muy presente" en Cataluña; recordó las inversiones que se están haciendo en la comunidad y señaló dos "incoherencias" de los mandatarios catalanes: la primera, que en su lista de reivindicaciones incluyeran la financiación autonómica, pero que luego no quisieran participar en la negociación conjunta pactada tras la conferencia de presidentes autonómicos -el Ejecutivo ha enviado una carta a Junqueras recordando que está a punto de finalizar el plazo para que designen a un experto para participar en los grupos negociadores-, y la segunda, que invoquen el derecho de manifestación -en alusión a la marcha de apoyo a Mas-, pero luego pretendan incumplir la ley y celebrar un referéndum ilegal. "Esperemos que al final impere el sentido común. Vamos a pedir la máxima colaboración a todos los partidos", añadió.
"En España no se juzga a nadie por sus ideas políticas", ha insistido el portavoz popular. "Hoy se juzga a un dirigente por haber desobedecido una decisión del Tribunal Constitucional y porque nadie está por encima de la ley". Casado ha insistido en el doble mensaje del Gobierno para responder al desafío soberanista: "Diálogo y firmeza para exigir el cumplimiento de la ley". El Ejecutivo "invierte en Cataluña y va allí a inaugurar infraestructuras. No hay un agravio. No es cierto eso de que España robaba a Cataluña. Quien robaba a Cataluña era Convergència", ha añadido el vicesecretario, que entiende que la "sobreactuación" de los dirigentes independentistas obedece a que empiezan a ser conscientes de que "el proceso secesionista no conduce a nada". "Aquí no valen enemigos imaginarios. El Gobierno de España es el mejor aliado de los catalanes".
Preguntado por las declaraciones del expresidente catalán, que durante el juicio ha insistido en que el propio Gobierno aseguró que la consulta del 9-N por la que ahora estaba siendo juzgado no tenía ningún valor legal, Casado ha contestado: "Lo que debería hacer el señor Mas es aclararse. No se puede sorber y soplar al mismo tiempo. Si hubiera cumplido la ley, no tendría que estar sentado en el banquillo. Es un despropósito poner en duda la actuación de los tribunales".
Por su parte, el ministro de Educación y Cultura y portavoz del Gobierno, también se ha referido al juicio. "No hay que tener miedo a los tribunales. Al revés, todo lo contrario. Hay que ir para aclarar las cosas", ha declarado en Onda Cero. El titular de Asuntos Exteriores, Alfonso Dastis, ha insistido, desde Bruselas, en que la declaración de Mas "no tiene que verse de ninguna manera especial; es una actuación de los tribunales prevista perfectamente en el orden constitucional y en el Estado de derecho".
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