_
_
_
_
_

El descuartizador de Ponteareas, culpable de homicidio

José Antonio Frutos Ayala mató a golpes a su amigo, lo descuartizó y lo metió en un congelador

Edificio de Ponteareas donde fue hallado el cadáver.
Edificio de Ponteareas donde fue hallado el cadáver.Lalo R. Villar

El jurado popular de la Audiencia de Pontevedra ha declarado este jueves por unanimidad culpable al empresario de Ponteareas José Antonio Frutos Ayala, que en marzo de 2014 mató a golpes a su amigo José Isasi González y después cortó su cuerpo con una sierra eléctrica para poder meterlo en un arcón congelador con el que convivió tres meses.

Tras retirarse a deliberar la tarde del miércoles, durante apenas cuatro horas, los miembros del jurado no han tenido dudas para responder a las preguntas formuladas por el tribunal y se han ceñido a los hechos descritos por el ministerio fiscal. El caso ha quedado visto para sentencia.

Más información
Cuatro detenidos tras el hallazgo de un bebé muerto en un contenedor en Alicante
Hallados los cuerpos de un hombre y una mujer en Salamanca

Tanto el fiscal como la acusación particular han considerado la confesión tardía del acusado como atenuante, por lo que han cambiado la tipificación de los hechos de asesinato a homicidio, como habían solicitado en un principio. Ese cambio ha reducido de 16 a 12 años y medio la petición de condena. Para su cómplice confeso, David Pumares, también hallado culpable de encubrimiento, también se rebajó la petición de cárcel de dos años a seis meses.

El jurado ha admitido como probado el relato de los hechos del fiscal para emitir su veredicto. José Sagredo se ha limitado a exponer su escrito de conclusiones en el que no quedó acreditado que hubiera alevosía, aunque sí que lo mató pudiendo evitarlo. "Se ha hecho justicia y se ha hecho rápido", ha dicho el representante del ministerio público.

Según su relato, Frutos Ayala atacó a la víctima, el marinero de Nigrán condenado por narcotráfico José Jesús Isasi González, poco después de regresar de una larga noche de copas por Ponteareas. Entre ambos surgió una discusión, por lo que el acusado golpeó mortalmente a su amigo repetidas veces en la cabeza con un objeto contundente, probablemente una plancha. Los peritos determinaron que el acusado le asestó hasta catorce golpes.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Frutos Ayala ha declarado ante el tribunal que le dio un empujón a su amigo y este se golpeó la cabeza con el borde de la cama. Luego le asestó "más golpes para que no sufriese". "Para mí, ya estaba muerto", ha dicho, sin entrar en los detalles del último capítulo del crimen, cuando compró un arcón congelador, troceó el cuerpo con una radial a la altura de la cabeza y las rodillas, y lo ocultó allí hasta que el 6 de junio fue descubierto por la Guardia Civil.

Tampoco el homicida ha desvelado el verdadero móvil del brutal crimen, ni su cómplice, al que confesó que había matado a su amigo y le pidió que le ayudara a huir a Portugal, donde permaneció escondido hasta diciembre de 2014, cuando se entregó a la Guardia Civil. De hecho, la hermana de Frutos Ayala ha pedido al tribunal hacer una pregunta al acusado, pero la presidenta de la Sala le contestó que no podía. Entre lágrimas, la testigo susurró: "Solo quería preguntarle por qué lo hizo".

La abogada del acusado, que se encuentra en prisión preventiva a la espera de la sentencia, ha pedido para su cliente la puesta en libertad tras conocer el veredicto del jurado, que no concluye que el homicidio fuese premeditado. Pero su reiterada petición fue desestimada por la presidenta del tribunal.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_