Ciudadanos: “Nos hemos dirigido a los inconformistas”
Villegas, vicesecretario general, analiza las claves de la campaña de su partido
José Manuel Villegas, vicesecretario general y jefe del equipo de campaña de Ciudadanos, analiza la campaña del partido. Defiende que Albert Rivera ha encontrado su hueco pese a los intentos de Mariano Rajoy y Pablo Iglesias por polarizar el debate. Su formación aspira a repetir un resultado similar al del 20-D, pese a que llegó a las elecciones temiendo que la repetición electoral le penalizara duramente al impulsar a los electores a elegir a uno de los partidos que tienen opciones de ganar el 26-J y desbloquear la formación de gobierno. "Es la persona con más olfato político que conozco", dice de él Rivera.
Pregunta. ¿Cree que el Brexit puede influir en el resultado del 26-J?
Respuesta. Se puede producir una sensación de miedo en el último día de campaña, pero también puede servir para movilizar a la gente y que piense en la importancia de participar en las elecciones como fórmula de buscar soluciones. Puede ser un elemento movilizador.
P. ¿Ha sido la campaña de la polarización?
R. Se ha intentado polarizar, pero nosotros hemos sido capaces de hacernos nuestros huecos entre las fuerzas del PP y de Podemos, que pretendían monopolizar la campaña desde los extremos y hacer una campaña de bandos. Hemos encontrado nuestro sitio, teniendo presencia y protagonismo. Era complicado, pero estamos satisfechos.
P. ¿A quién buscaban movilizar, más allá de los convencidos?
R. Hay en España mucha gente que no está contenta con cómo se han hecho las cosas, que piensa que estamos ante un sistema agotado, y un ciclo que se acaba, y que quiere buscar alternativas. Ahí estaban nuestras propuestas, yendo a ese nicho de inconformistas a los que no les gusta lo que ven y que tampoco compra determinadas soluciones. Hemos intentado darle una oferta atractiva, de cambio sensato y a mejor.
P. ¿Influyó el debate electoral en su estrategia? ¿Y en la campaña?
R. En el debate desarrollamos nuestra estrategia general de campaña, buscando ese hueco en medio entre los dos extremos que intentaban polarizar la campaña. Se consiguió. Como el debate fue muy al principio, sirvió para marcar la tendencia de una campaña positiva por nuestra parte, en la que nos hemos hecho un hueco, con presencia y protagonismo. El candidato ejecutó muy bien la estrategia. Ha sido el único momento en el que los cuatro candidatos han podido confrontar, pero no se produjo ningún acontecimiento extraordinario, error o insulto que haya marcado la campaña. Era muy conservador tenerlo tan al principio. Está bien que marque el inicio de la campaña, pero habría estado bien tener un segundo debate en la segunda semana.
P. ¿Han notado más o menos intensidad en la participación del electorado? ¿Se ha notado el hartazgo?
R. He detectado normalidad. Hemos hecho una campaña diferente, con menos actos grandes, de partido, de más cercanía. No hemos notado rechazo. En los medios de comunicación tampoco han decaído las audiencias o el interés. La gente puede estar enfadada, y con razón, pero no ha perdido el interés por la política. Sabe que estamos en un momento importante y que hay que solucionarlo. Pienso que la participación puede estar alrededor del 70% y podría haber sorpresas y que nos fuéramos más arriba. Si hubiera una participación muy por encima del 68-69% que han manejado la mayoría de encuestas, los resultados podrían diferir.
P. ¿Ha sido esta una campaña centrada en los futuros pactos únicamente? ¿Creen que ha servido para debatir propuestas o contenidos que interesaran a la gente?
R. No ha sido una campaña de contraponer programas, ya se hizo en diciembre y después. Ha sido una campaña para ver cómo se desbloquea la situación del país, marcada por los valores e ideas generales que cada partido quiere aplicar, y no por las medidas concretas de cada programa, que ya se habían discutido. Ha sido diferente. Todos teníamos previsto que fuera así. Es normal. Es una situación de bloqueo. No hemos sido capaces de sacar un gobierno, y una de las premisas es desbloquear la situación y ser capaces de sacar adelante un gobierno. Ese ha sido el tema central de la campaña. Hemos llamado al PP y al PSOE a sentarnos desde el mismo lunes con el compromiso de no levantarnos hasta que haya gobierno. Creemos que ese gobierno tiene que ser de cambios y reformas, pero cuando uno se sienta a la mesa debe hacerlo sin condiciones, cada uno con propuestas, pero sin líneas rojas. Uno se sienta a negociar, ceder y pactar. Iremos con las diez propuestas que haríamos en los 100 primeros días de gobierno.
P. ¿Cuál ha sido el mejor y el peor momento de la campaña?
R. El mejor fue el debate, porque se pudo transmitir de forma clara y ante millones de españoles nuestra posición. Se pudo concretar de forma brillante que existe una alternativa al inmovilismo y a la política populista de Podemos. El peor fue el viernes, por el Brexit, ya que somos profundamente europeístas.
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