El coordinador andaluz de Manos Limpias dimite por “pérdida de confianza”

"Si estás luchando en una causa que consideras impoluta y saltan escándalos como este, es normal que quieras marcharte". Así explica el hasta el sábado coordinador general de Manos Limpias en Andalucía, Arnaldo Fernández, su dimisión a seguir representando al sindicato después de que su secretario general, Miguel Bernad, y el presidente de Ausbanc, Luis Pineda, permanezcan en prisión por encabezar una supuesta trama de extorsión para exigir dinero a bancos y empresarios a cambio de publicidad para sus medios. El letrado ha alegado que renuncia por "pérdida de confianza" y por no sentirse "cómodo". 

Fernández presentó su "renuncia y dimisión irrevocable" a la junta directiva de Manos Limpias el pasado sábado. Tras defender la presunción de inocencia de Bernad, Fernández ha sustentado su marcha en la intención de evitar que este escándalo le "salpique" y afecte a su trayectoria profesional. "Cuando saltan casos como este es que algo hay, siembra la duda entre la gente. Aunque al final puede que quede en nada... Ya hay quien me ha preguntado que cuánto dinero me he llevado", afirma Fernández, quien recuerda que la abogada y secretaria de Manos Limpias en Asturias María Tamargo también dimitió "por falta de confianza" hace poco más de una semana.

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Ya el pasado martes, Fernández intentó marcar distancias entre su gestión como coordinador general y la sede central del sindicato. "Somos independientes. Hay una independencia financiera, orgánica, de estructura...", enumeró el letrado antes de negar que el sindicato se fuera, de momento, "al garete". La renuncia de Fernández sorprende, precisamente, por la defensa que la semana pasada hizo de la labor que realiza el sindicato. "Esto [la Operación Nelson] no nos resta legitimidad", afirmó.

Fernández ha asegurado que se marcha sin dejar "huérfano" y "desamparado" al sindicato al haber encontrado una procuradora que represente a Manos Limpias en el caso de los ERE y en el de las supuestas facturas falsas de UGT tras la renuncia de sus anteriores representantes. "Me marcho con los deberos hechos. No me hubiese perdonado que nos sacaran de casos tan importantes como el de los ERE", ha asegurado Fernández, quien recuerda que su cargo era más representativo que funcional y que ahora es decisión de la junta directiva si nombra un sustituto.

Los jueces instructores de ambas causas dieron al sindicato un plazo de cinco días para que designaran a un nuevo abogado y procurador después de que el pasado 13 de abril el letrado José María Gómez de León (detenido también en dicha operación) y el procurador Manuel Jesús Campo Moreno renunciaron a seguir representante al sindicato en estos casos "por motivos personales". El sindicato ya ha nombrado como abogado a Rafael Prieto y esta semana formalizará el de la procuradora. Además de la causa de los ERE y la de las facturas falsas de UGT, el sindicato está personado en Andalucía en la de los cursos de formación y en los casos sobre Mercasevilla e Invercaria, entre otros.