Urkullu confirma que las elecciones vascas serán en octubre
El lehendakari asegura que no ve pactos posibles "ni con este Rajoy ni con este PP"
Las elecciones vascas serán en octubre. El lehendakari, Íñigo Urkullu, ha confirmado este viernes en Radio Nacional de España que el adelanto electoral en España no va a afectar a Euskadi y que la convocatoria de las elecciones autonómicas vascas será después del verano: se celebrarán en octubre, el mismo mes en el que se celebraron en 2012. "Tenemos mucho que hacer y todavía hay mucha actividad pendiente esta legislatura", ha dicho. El Gobierno vasco ha remitido a la Cámara esta semana dos proyectos de ley.
Urkullu ha acabado por reconocer después de varias preguntas que no habrá adelanto electoral, como llegó a estudiar en algún momento. Así lo dijo hace una semana cuando con motivo de los mil días de gobierno reunió a los principales cargos públicos en Vitoria para aconsejarles que sigan trabajando con todos los planes que el Ejecutivo tiene abiertos.
El lehendakari no ha querido pronunciarse sobre sus preferencias para las elecciones nacionales. Si hasta ahora había apostado por un Gobierno del cambio que permitiera revertir las relaciones entre administraciones y que ha calificado de malas, esta mañana se ha limitado a asegurar que desde luego él no pone vetos a nadie. "Pero desde luego con este Rajoy no, y con este PP tampoco, no sé si hay otro Rajoy y otro PP".
También ha hablado de las dificultades de acordar con Ciudadanos. "Si Ciudadanos habla de eliminar el Concierto que está reconocido por la Constitución Española, ahí tenemos una imposibilidad para entendernos", ha dicho, tras criticar el "postureo" de los partidos con el debate sobre el ahorro de costes en las nuevas elecciones. "El mejor ahorro hubiera sido no ir a las elecciones. Es interesante abordar los gastos de campaña, ya se hace, pero es postureo lo de abordar los gastos, por lo que estamos viendo de indefinición".
El lehendakari ha emplazado a la izquierda abertzale a ser más contundente con su revisión crítica del pasado y ha sugerido que la sociedad vasca echa en falta un pronunciamiento claro en contra de la violencia y de proximidad a las víctimas de ETA. Urkullu ha eludido la pregunta sobre si considera presos políticos a los de ETA —"están cumpliendo condena", ha dicho— y sí ha rechazado que los que están fuera de Euskadi sean refugiados. "Yo entiendo por refugiados a otros", ha puntualizado.
En su opinión el colectivo de presos de ETA tiene que dar pasos hacia los beneficios penitenciarios y ha asentido a la pregunta de si cree que los presos de ETA son rehenes de la organización. "Lo hemos dicho muchas veces, hay una estrategia de no acogerse a beneficios penitenciarios, hemos visto estrategias en el pasado en las que reivindicaban el derecho de los presos a cumplir íntegramente su condena. Esto es un cierre de filas permanente y cuya principal consecuencia es que entienden como disidentes a quienes daban el paso del arrepentimiento, o de intentar buscar beneficios penitenciarios. Es la vía Nanclares, tan denostada", ha criticado. La izquierda abertzale pide ahora a los presos que sigan ese camino.
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