Podemos y su socio Més rechazan una candidatura conjunta en Baleares

Las bases de Podemos y Més, que gobiernan en coalición con el PSOE en algunas Corporaciones locales de Baleares —como en el Ayuntamiento de Palma, en el Consell de Mallorca o el Consell de Menorca—, han rechazado en firme la posibilidad de formar una candidatura conjunta para las elecciones generales del próximo 20 de diciembre. El "no" a la integración en una lista unitaria ha sido respaldado por el 90% de sus respectivos delegados en asambleas paralelas, por diferencias como el liderazgo de la candidatura o la denominación de la formación.

Las dos formaciones pretenden mantener su propia marca e identidad política. Tanto Podemos como Més aspiran a obtener representación en el Congreso de los Diputados y romper el tradicional reparto bipartito entre el PP y el PSOE, en los ocho escaños asignados a la comunidad.

El pacto no ha cuajado por diferencias en el liderazgo de la lista, en su denominación, en el orden de las siglas, en la autonomía y en la adscripción de los eventuales diputados electos. No obstante, queda abierta una lejana posibilidad de llegar a un acuerdo para una candidatura unitaria en Menorca y Mallorca para el Senado. Por el momento Més la ha sugerido y Podemos sí la contempla en Menorca.

La operación electoral conjunta entre Podemos y Més, al margen del PSOE, quedó sellada por parte de ambos partidos al acordar los pactos de mayoría en la autonomía de la izquierda en Palma y Mallorca, y con distintas fórmulas en Menorca.

Los líderes de Més, Biel Barceló y David Abril, y de Podemos, Alberto Jarabo y Laura Camargo, expresaron durante semanas su voluntad de converger y por eso celebraron contactos, pero las exigencias cruzadas sobre el protagonismo de las siglas y los nombres encalló la negociación.

La desconfianza entre las cúpulas de Més y Podemos se acentuó por los desmarques de la formación de Pablo Iglesias ante distintos nombramientos y propuestas del Gobierno balear. Podemos —que se expresó próxima a Més— no entró a formar parte del Ejecutivo, por su "desconfianza" hacia el PSOE, que forma parte de la coalición. La formación emergente sí comparte el poder con los socialistas y Més en el Ayuntamiento de Palma, el Consell de Mallorca, el Consell de Menorca y el Consell de Ibiza.

El mapa electoral que quedó tras los comicios autonómicos del pasado 24 de mayo se define en cuatro ejes: cayó el bipartidismo, el PP sacó 121.000 votos —20 diputados— y el PSOE, 81.000 —14—, irrumpieron en la escena Podemos, con 62.000 votos —10 escaños— y Més, con 65.000 —9 diputados, con sus afines de Menorca—. Además también entraron en el Parlamento balear el partido regionalista El PI, con tres diputados; Ciudadanos, con dos y Gent per Formentera —aliado de los socialistas—, con uno.  Izquierda Unida, con su marca Guanyem, no logró representación autonómica, aunque en el Consell y el Ayuntamiento de Ibiza tiene voz desde las candidaturas local e insular que impulsó Podemos.