Sin cara a cara de presidentas en el Parlamento de Baleares

No se ha celebrado el cara a cara inédito en la política autonómica, un breve tú a tú, entre la presidenta del Parlamento de Baleares, Xelo Huertas (Podemos), y la presidenta del Gobierno regional, Francina Armengol (PSOE). Huertas ha retirado, a última hora, la pregunta que debía formular en el pleno de este martes a la socialista, en la sesión de control al Gobierno. La pregunta versaba sobre los derechos recortados a empleados públicos.

Huertas ha desistido, finalmente, tras las muchas reflexiones lanzadas por otros diputados al entender que, con esta intervención, pondría en cuestión su rol institucional de neutralidad al frente de los debates en la Cámara. En su propia formación, Podemos, que le había dado libertad, también se plantearon las dudas sobre la oportunidad de su decisión.

Podemos está dispuesto a que se note su presencia en las instituciones en Baleares, quiere hacer valer el peso de los 10 diputados con los que facilita la mayoría absoluta a la izquierda, el Gobierno del PSOE (15 escaños) y MÉS (9). A veces, en sus proclamados deseos de innovar, abre situaciones insólitas,

Xelo Huertas pretendía bajar del estrado donde ejerce de gestora y árbitro de la vía parlamentaria para asumir su condición de diputada a pie de escaño. La segunda autoridad institucional decidió interpelar a la primera, sin someterlo a debate o consideración de su grupo.

El episodio, insólito, surgió tras la crisis pública abierta por Podemos al votar con la oposición —el PP— contra el Ejecutivo balear, para reclamar el cese de dos cargos socialistas, parientes de otras autoridades. Además, la formación de Pablo Iglesias mantiene una cruda pugna pública y parlamentaria para hacer caer a un gestor socialista de una empresa pública de cartografía, Francisco Fernández Terrés, al que reprueban por su pasado político.

Sin preguntas al propio Gobierno

En esta legislatura post-PP, los partidos que forman parte del Gobierno PSOE-MÉS renunciaron a hacer uso del turno de preguntas a sus propios consejeros, consideradas "de autobombo" y un recurso del poder para mitigar el peso público de la oposición. Podemos no secunda la renuncia porque se sitúa en la "media oposición".

Alberto Jarabo, de Podemos, anunció, al hacer balance de los 100 días de Gobierno PSOE-MÉS que "la legislatura sería larga y con tensión" y reiteró una cadena de expresiones de censura al Ejecutivo, en especial al PSOE, por "desconfianza", "distancias", "vicios", "inercias", "deslealtad", "sospechas". Dio varias pinceladas positivas en la acción social que atribuyó a su presión y recordó que ellos nacen en la calle porque "no nos representan" los partidos "de la vieja política".

Una sindicalista que era del PSOE

La presidenta de la Cámara balear, Xelo Huertas, se estrenó en los titulares, a los pocos días de ser elegida, al reclamar al rey Felipe VI, durante su primera audiencia de verano en el Palacio de Marivent, que suspendiera el cóctel de encuentro con la sociedad balear previsto en el Palacio de la Almudaina en Palma. Le pidió que se destinara la partida prevista a comedores donde se atienden personas necesitadas.

Huertas es funcionaria local, sindicalista de UGT en la Administración local y exmilitante del PSOE, donde no ganó unas primarias internas en Marratxí e inició un proceso de ruptura personal con el partido.