Podemos amaga con romper la alianza de poder del Gobierno balear

La izquierda de Baleares no ha roto, de momento, su alianza de mayoría absoluta en el Parlamento autonómico. El grupo de Podemos ha amenazado con desmarques y con "romper" el acuerdo de poder con PSOE y Més —que integran el Gobierno—, si no eran atendidas sus peticiones en relación a un nombramiento de un cargo intermedio. El grupo de la formación que lidera Pablo Iglesias ha formulado, este martes, cinco preguntas fáciles y nada ácidas al Gobierno de Baleares, que apoyó en la investidura.

PSOE y Més han renunciado a intervenir en el turno de control para evitar caer en el "autobombo". Podemos quiere fiscalizar y presionar a sus socios, para intentar corregir aquello que no se ajuste a los "acuerdos para el cambio". Los reproches políticos y amenazas de posible ruptura por parte de Podemos, por discrepancias ante el nombramiento de un cargo intermedio por parte del PSOE, que han lanzado en los medios de comunicación, han quedado en la recámara y fuera del ámbito parlamentario, por ahora.

Uno de los líderes del Podemos balear, Alberto Jarabo, ha batallado contra la designación firme del nuevo gerente de la empresa autonómica de cartografía, Francisco Fernández Terrés, un arquitecto militante del PSOE de Menorca, que por su gestión como político local de Mahón estuvo bajo lupa judicial —sin ser condenado—, al cerrarse distintas causas de supuesta corrupción urbanística.

La formación emergente expresa continuamente sus recelos respecto al PSOE y ve en el arquitecto Francisco Fernández Terrés una figura de la "vieja política", ligada a los empresarios de la construcción y a episodios de supuesta corrupción. Es por esto que reclama su cese, pero el PSOE se niega e indica que los cargos del Gobierno son responsabilidad de quienes integran el Ejecutivo en el que Podemos rechazó participar. El grupo de Més reprocha a su socio las críticas porque las consideran un "error" de actitud.

De esta forma, la polémica ha quedado en el congelador. La anunciada interpelación parlamentaria de Podemos sobre el discutido nombramiento se producirá dentro de dos o más semanas. No obstante, Podemos sí ha marcado finalmente cierta distancia con el Ejecutivo, ya que ha aprovechado un debate sobre el límite del déficit para criticar la propuesta del PSOE de crear una facultad de Medicina.

Podemos revindica su papel de "segunda fuerza" dentro del frente gubernamental. Tiene 10 de los 59 diputados baleares, el PSOE suma 15 y Més de Mallorca y Més de Menorca otros nueve. Las críticas de los diputados de Podemos a sus socios han sido dulcificadas, este martes, y se han materializado en una mera vindicación de sus iniciativas en el programa gubernamental: contra la explotación laboral, la defensa de la Memoria Histórica y la apertura de fosas y sobre la gestión de la televisión autonómica. Podemos reclama una cadena pública, IB3, "sin censura ni explotación laboral", según Alberto Jarabo.

Los dirigentes del Gobierno balear, que cumple 70 días en el poder, se lamentan de la "erosión pública" que ha provocado la polémica, por la "apariencia de desunión" que suponen las críticas y advertencias públicas de posible ruptura de la alianza de poder que lanza Podemos, socio imprescindible.