La oposición andaluza reclama también la dimisión de Chaves

Los principales partidos de la oposición al PSOE en Andalucía (PP, Podemos y Ciudadanos), de cuya abstención depende la investidura de la candidata socialista y presidenta en funciones de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, han insistido este jueves en pedir también la cabeza del expresidente Manuel Chaves después de que su sucesor, José Antonio Griñán, haya confirmado que renuncia a su cargo de senador y a cualquier otro para evitar la presión al partido.

Esta situación deja a Chaves en la tesitura de seguir los pasos de Griñán o mantenerse en el escaño de diputado. El segundo ha comunicado a Susana Díaz su renuncia a ser reelegido como senador por designación del Parlamento andaluz, del que dependía su continuidad en la Cámara Alta. Pero el cargo de Manuel Chaves está en sus manos y de la Ejecutiva federal socialista, que aún no se ha pronunciado. "Griñán ha tomado una decisión. Lo respeto, pero en mi caso es diferente. Yo soy diputado y, en el momento oportuno, tomaré una decisión", se ha limitado a señalar esta mañana.

El secretario general del Grupo Socialista en el Congreso y secretario provincial del PSOE de Málaga, Miguel Angel Heredia, ha calificado de "personal y coherente" la decisión de Griñán de abandonar la política, pero ha evitado opinar obre si Chaves debería seguir sus pasos.

El PP fue claro y reclamó que Chaves siga los pasos de Griñán, a quien recriminó haber tomado "tarde" la decisión. El portavoz parlamentario popular, Carlos Rojas, afirmó que esta situación no altera su rechazo a la investidura de Susana Díaz. "En estos momentos no se da ninguna de las circunstancias para facilitarla", afirmó el diputado, aunque fuentes socialistas creen, no obstante, que hay una puerta abierta al diálogo después de que el PP haya pedido la interlocución directa de la presidenta en funciones.

Albert Rivera califica la decisión de Griñán de "un buen paso" hacia un acuerdo en Andalucía

El líder nacional de Ciudadanos, Albert Rivera, calificó la decisión de Griñán de "un buen paso" hacia un acuerdo que permita gobernar en la comunidad a Díaz, pero exigió que esta renuncia vaya acompañada de la de Chaves. En ese caso, se mostró dispuesto a "sentarse a hablar".

Izquierda Unida, pese a la dimisión de Griñán, reclamó que ni esta ni la de Chaves centre el debate y las negociaciones, sino la situación actual de Andalucía en cuanto a las cifras del paro y personas desfavorecidas.

El portavoz del PSOE en el Parlamento andaluz, Mario Jiménez, al igual que Heredia, también alabó la decisión de Griñán y la calificó de "trascendente" y "coherente", aunque rechazó que esta renuncia y la que reclaman de Chaves no deberían ser condición para permitir la investidura de Susana Díaz. "Una cosa no debe mezclarse con otra. En el mandato de los ciudadanos en las urnas no hay líneas rojas", afirmó.