Ciudadanos pone duras condiciones para acoger a los diputados de UPyD
Cantó no podría ser candidato a la Generalitat y serían afiliados de base
Los tres diputados de UPyD que han manifestado su disconformidad con la dirección de Rosa Díez tendrán que dejar su escaño, pasar a ser militantes de base y abandonar sus aspiraciones políticas más inmediatas si deciden dar el paso de solicitar su integración en Ciudadanos.
Los dirigentes del partido de Albert Rivera, que aún recuerdan amargamente el fracaso de las negociaciones para fundir los dos partidos a finales de 2014, no extenderán una alfombra roja para acoger a Toni Cantó, Álvaro Anchuelo o Irene Lozano en el caso de que alguno opte por abandonar UPyD —ninguno de los diputados ha contactado en persona con el partido de origen catalán—.
Así, si Cantó decidiera fichar por Ciudadanos antes de las elecciones autonómicas de mayo tendría que renunciar a la candidatura a presidir la Generalitat de Valencia, que ocupa en UPyD (“Confirmamos al ciento por ciento que nuestra candidata a la Comunidad es Carolina Punset y al Ayuntamiento Fernando Giner”, dijeron en el partido). Para no incitar al transfuguismo, la formación de Rivera pediría que los tres entregaran su acta de diputado e ingresaran a título individual en sus filas. Finalmente, según confirmaron fuentes de Ciudadanos, su trayectoria política no les supondría ninguna ventaja. “Serían un afiliado de base más. Aquí los candidatos se eligen mediante listas abiertas y voto secreto”, dijeron fuentes de la directiva de Ciudadanos. “Complicado lo tienen”, resumieron.
“Alguien ha dicho que mañana abandono UPyD. No es cierto”, tuiteó el miércoles el diputado Cantó. “Tengo muchas ganas de proponer y escuchar en el Consejo Político de este sábado”.
Han dicho que abandono. No es cierto Toni Cantó
Los ejecutivos del partido de Rivera saben que Anchuelo defiende la necesidad de una regeneración de UPyD y la continuidad de Díez; que Cantó tiene todas las opciones abiertas; y que Lozano, que ha pedido la dimisión de la portavoz de su partido, representa un caso especial. En los despachos de Ciudadanos todavía escuece la actitud de la diputada en las últimas negociaciones para fusionar ambas marcas. Entonces, Lozano acusó a Rivera y sus acompañantes de ser “demasiado ambiciosos”. Unas palabras que siguen doliendo en Ciudadanos.
Los tres diputados viven con tensión la llegada del sábado. Entonces se celebrará el Consejo Político de UPyD, cuya filial en Aragón exigió ayer la dimisión de la dirección en una carta firmada por 80 afiliados y más de 100 simpatizantes. Se espera que Cantó tenga un protagonismo estelar en la cita y que Díez defienda la autonomía de UPyD. Ningún escenario, sin embargo, es descartable como consecuencia de la división interna entre los que apoyan la continuidad de Díez, los que le piden que dimita y los que impulsan la fusión con Ciudadanos.
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