Piden dos años de cárcel por obras en la isla protegida de Tagomago

El fiscal de Ibiza, Mario López, solicita dos años de cárcel para el empresario alemán, Matthias Kühn, como presunto autor de un delito contra la ordenación del territorio y de otro contra los recursos naturales y el medio ambiente, por las obras e intervenciones que efectuó, sin licencias ni autorizaciones, en el islote ultra protegido de Tagomago, en Ibiza. Los trabajos ilegales, dice el fiscal, no pueden ser legalizados. Los muros, pavimentos, pasarelas, terrazas y demás han de ser derribados y retornar el paisaje y el entorno a su estado natural. Hubo movimientos de tierra, se retiró cubierta vegetal y zanjas de hasta 30 centímetros de profundidad en dos lomas de 1.400 metros cuadrados. Khün traslada en helicóptero a sus clientes a Tagomago para lo que construyó una pista allí. En las obras actuó maquinaria pesada. La isla es suelo rústico protegido. La ley de Costas protege la actividad en el litoral.

Matthias Kühn tiene el alquiler este islote para su explotación residencial y de ocio, para clientela de gran lujo, bajo la leyenda de ser “una de las más hermosas islas privadas“. Desde 1980 existe un solo chalé en el peñasco que ha sido reformado. Se ha ampliado un muelle-chiringuito en plan discoteca chill-out. El empresario inmobiliario está acusado por alterar terrenos, desbaratar ámbitos de nidificación de aves y asolar vegetación preservada.

Tagomago tiene 1,5 kilómetros de largo y 113 metros de ancho, es de propiedad privada y está a poca distancia del litoral de Ibiza. Es Área Natural de Especial Interés (ANEI), según una ley de Baleares, está amparada por la Ley para la Conservación de los Espacios de Relevancia Ambiental, es, además, un ámbito de la Red Natura 2000 de la UE y, asimismo, está catalogada como Lugar de Interés Comunitario (LIC) y Zona Especial de Protección de Aves (ZEPA). Es un refugio para la nidificación y vida de especies en extinción y alberga interesantes praderas submarinas de posidonia y vegetales endémicos en su superficie.

Las obras fueron efectuadas en 2008 y 2009. El constructor de las mismas, Guido Hecker, recibe la misma petición que el promotor, de dos años de cárcel. El fiscal, en contra del criterio del juez instructor, sostiene que las intervenciones efectuadas en Tagomago, además del delito contra la ordenación las obras, al afectar a especies protegidas -como la tala de sabinas –especie protegida en Baleares-, suponen la comisión de un delito contra el medio ambiente. Los ecologistas del Grupo de Estudios de la Naturaleza (GEN) ejercen la acusación.

El empresario sostiene que sus obras fueron legalizadas. Khün, que fue condenado en el pasado por un delito fiscal a 13 meses de cárcel, es conocido socialmente por su relación con la artista Norma Duval. Los diputados econacionalistas del grupo MÉS, Fina Santiago y David Abril, piden responsabilidades penales por supuesta prevaricación a los técnicos de la Comisión de Medio Ambiente del Gobierno de Baleares que votaron a favor de ampliar el negocio litoral en Tagomago, con más mesas, amarres y pasarelas.