Medio Ambiente alerta del “impacto” de los sondeos en especies protegidas
Un informe del ministerio desaconseja las prospecciones petrolíferas en el Mediterráneo
La presencia de cetáceos como el delfín mular o el rorcual común es "permanente" en la zona del golfo de Valencia donde la empresa Capricorn Spain Limited quiere investigar si hay hidrocarburos. Por tanto, independientemente de la época del año en la que se lleven a cabo los sondeos sísmicos previstos, "estas especies siempre recibirán un impacto difícil de minimizar". Así lo concluye un informe de la Dirección General de Sostenibilidad de la Costa y del Mar, departamento dependiente del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, que analiza si la campaña que propone realizar esta empresa en el Mediterráneo es aconsejable desde un punto de vista medioambiental.
Su conclusión es clara: la potencial afección negativa sobre la fauna marina presente en la zona desaconseja el proyecto. El informe, al que ha tenido acceso EL PAÍS, recuerda que la zona en la que Capricorn quiere investigar está dentro de un corredor de migración de cetáceos, un corredor "único de alta importancia para mamíferos y tortugas marinas". Especies, además, protegidas por la legislación europea, nacional o autonómica y por diferentes convenios y acuerdos internacionales ratificados por España, añade el informe.
Esta evaluación de un departamento ministerial, hecha pública por la organización que lucha contra las prospecciones en el Mediterráneo Alianza Mar Blava, llega apenas unos días antes de que el ministerio que lidera Isabel García Tejerina tenga que aprobar o denegar el permiso para llevar a cabo el proyecto. El 10 de diciembre se cumplen los tres meses de plazo para formular declaración de impacto ambiental (DIA), sea esta positiva o negativa.
El proyecto se localiza en el golfo de Valencia, a unos 50 kilómetros de esta ciudad, 21,5 de Denia, 50 de Ibiza y 25 de las Islas Columbretes. La exploración sísmica marina se lleva a cabo para confirmar si hay estructuras geológicas susceptibles de almacenar hidrocarburos. En este caso, el área que se investigará es de unos 2.400 kilómetros cuadrados. Una embarcación recorre la zona arrastrando unos cañones de sonido de aire comprimido que emiten sonidos cada 10 segundos que atraviesan la capa de agua y parte del subsuelo y rebotan hacia la superficie. Los ecos que generan se graban, los datos se procesan y sirven para elaborar mapas de las estructuras marinas.
La empresa tenía previsto realizar la campaña entre octubre de 2014 y febrero de 2015, según la información ambiental que remitió al ministerio. Es la época de menor sensibilidad ambiental, según aseguró. En los trabajos participarían un buque de adquisición y cuatro embarcaciones auxiliares en tareas de vigilancia.
El informe de la Dirección General de Sostenibilidad concluye que "la potencial afección negativa sobre la fauna marina presente en el área de actuación es de una magnitud suficiente como para desaconsejar que se desarrolle el proyecto". No solo los cetáceos se verían perjudicados por los disparos de aire comprimido: "La tortuga boba también se verá afectada por la actividad sísmica dado su carácter residencial en la zona", señala el texto. Que recuerda en más de una ocasión que "todas las especies de cetáceos, tortugas y aves marinas presentes en el ámbito geográfico del proyecto están protegidas".
A diferencia de Canarias, donde gobierna una coalición de Coalición Canaria y el PSOE, tanto en la Comunidad Valenciana como en Baleares los ejecutivos están en manos del Partido Popular. Una DIA favorable del Gobierno central pondría en pie de guerra a estas autonomías, que llevan meses haciendo campaña en contra de los proyectos de sondeos sísmicos.
El eurodiputado popular y vicesecretario general de Estudios y Programas del PP, Esteban González Pons, ha mostrado hoy su deseo de que el informe negativo de la Dirección General de Sostenibilidad de la Costa y el Mar sobre las prospecciones "conduzca definitivamente a una declaración de impacto ambiental negativa que acabe con la posibilidad de hacer sondeos petrolíferos en el Golfo de Valencia".
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