El auxilio de un joven salvó la vida del niño de 13 años apuñalado por un tendero
El herido pasó el martes a planta después de sufrir dos operaciones. El agresor utilizó un cuchillo de 30 centímetros que llegó a tocar el corazón.
Fue la rápida intervención de un joven de 16 años con conocimientos de primeros auxilios la que salvó la vida de Gonzalo Sánchez, de 13 años de edad, después de haber sido apuñalado por un comerciante el sábado por la noche en Torrelavega (Cantabria). El suceso ocurrió cuando un grupo de adolescentes entró en un establecimiento de alimentación y causó cierto alboroto. El propietario del comercio les pidió que lo abandonaran, momento en el que uno de los muchachos golpeó el cristal de la fachada, hecho que provocó la salida del tendero con un cuchillo en la mano. Según testimonios que se van conociendo, la víctima ni siquiera había entrado en el establecimiento, pero fue atrapado por el comerciante. El muchacho cayó al suelo y recibió una cuchillada de izquierda a derecha en el pecho que le interesó al pulmón y llegó a tocar el corazón. El adolescente pasó el martes por la tarde a planta después de dos intervenciones quirúrgicas realizadas durante el fin de semana. El agresor utilizó un cuchillo de cortar calabazas, de unos 30 centímetros de largo.
El juez ha decretado este lunes prisión provisional incondicional para el agresor, al que le imputa un delito de homicidio en grado de tentativa. Según han informado a Europa Press fuentes judiciales, el acusado, de 30 años y nacionalidad china, pasó ayer domingo a disposición judicial y el juez decretó para él prisión no eludible con el pago de una fianza. El agresor es padre de familia, tiene un hijo de tres años y su mujer se encuentra embarazada.
Los hechos sucedieron hacia las 10 de la noche del pasado sábado. Un grupo de una decena de adolescentes, de entre 13 y 14 años, estaban en la tienda de comestibles Xia, en la calle de José Posada Herrera, cuando el dueño del local les pidió que se marcharan porque estaban alborotando. Los chicos no se tomaron bien esa orden y al salir aporrearon el cristal de la fachada del establecimiento. El propietario, de unos 30 años de edad y de nacionalidad china, salió tras ellos a la carrera empuñando un cuchillo de cortar calabazas en su mano.
Los chavales echaron a correr en varias direcciones, pero uno de ellos, Gonzalo, cayó al suelo. Según algunos testigos, el propietario del comercio le dio unas patadas mientras estaba en el suelo intentando levantarse. A continuación, le asestó una puñalada en el tórax. La herida provocó una fuerte hemorragia y el menor llegó al hospital Marqués de Valdecilla de Santander en estado muy grave y con una gran pérdida de sangre. La misma noche del sábado fue intervenido para quedar en observación en la unidad de vigilancia intensiva (UVI). Un joven de 16 años con conocimientos de primeros auxilios fue quien asistió a Gonzalo en primera instancia, taponó la herida, le colocó de costado e impidió que la hemorragia acabara con su vida en minutos.
Gran hemorragia
Mientras la víctima era trasladada al hospital, una dotación del Cuerpo Nacional de Policía acudió al establecimiento comercial, cuyo propietario reconoció los hechos y se entregó pacíficamente. El comerciante, que vive en la misma zona, había regresado a su local después de haber cometido la agresión a Gonzalo. El agresor argumentó que no era consciente de que había acuchillado al chico.
La cuchillada había afectado un pulmón de Gonzalo, que es hijo de un abogado cántabro. Los cirujanos tuvieron que operarle en dos ocasiones. “Los médicos dicen que entró en el hospital al límite; había perdido la mitad de la sangre”, declaró Álvaro, hermano de la víctima al periódico digital HoyTorrelavega. Y en la tarde del domingo, el chaval estaba fuera de peligro y el martes pudo subir a planta. El menor juega al fútbol en la cantera de la Gimnástica de Torrelavega.
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