El municipio de Cudillero debe afrontar la elección de su quinto alcalde en dos años

El Ayuntamiento de Cudillero ha celebrado esta mañana el sexto pleno desde las pasadas elecciones municipales para elegir el que sería su quinto alcalde en medio de una monumental bronca política. Pero la situación no se resuelve. Los socialistas, con mayoría absoluta, han acordado constituir una gestora que fijará mañana la nueva fecha para la celebración de otro pleno que aclare las cosas. 

El ambiente en el municipio costero asturiano se ha ido enfangando en los últimos 18 meses pese a que el PSOE en esa localidad cuenta con 8 ediles frente a los 3 del Partido Popular y los 2 de Foro Asturias. Pero hoy el PSOE solo tuvo dos concejales electos en el pleno tras una cascada de renuncias del grupo municipal. La reunión tenía como objetivo hacer cumplir el mandato del Tribunal Superior de Justicia de anular el nombramiento de Luis Fernández Garay como alcalde. 

La deriva comenzó cuando mayo de 2012 abandonó su puesto Francisco González Méndez, Quico, cabeza de lista durante dos décadas en las que los socialistas consiguieron amplias mayorías absolutas. Dejó su puesto para ocupar acta de diputado en la Junta, cargo que tuvo que abandonar al ser imputado por la Audiencia de Oviedo por supuestos cobros ilegales a hosteleros. Le sustituyó Gabriel López, que abandonó el puesto por motivos personales.

Para sustituirlo los socialistas apelaron a un artículo de la ley de Régimen Local que habilita a ediles no electos para alzarse con el bastón de mano. Ese supuesto amparó en el pasado a políticos vascos para acceder a las instituciones ante la amenaza terrorista. Pero el nuevo alcalde, Ignacio Fernández, duró poco. El Tribunal Constitucional tumbó su nombramiento por ser un edil no electo. Para entonces la mayoría de su lista en el Ayuntamiento había renunciado a ocupar el mando. A partir de ahí, el caos. Luis Fernández Garay (uno de los que había renunciado), fue investido cuarto alcalde y el Constitucional volvió a dictar sentencia para anular su nombramiento.

La Federación Socialista Asturiana pensó que lo mejor era constituir una gestora y forzó la dimisión de varios concejales. Algunos lo hicieron en desacuerdo con la evolución de los acontecimientos. Fue el caso de Victoria López, que abandonó este verano. Otros dos ediles, Nuria Álvarez y Vanesa Menéndez, renunciaron para dejar correr la lista hasta Garay, según informa La Nueva España. Otros tres se fueron para propiciar la creación de una gestora. Con la lista de suplentes agotada desde el pasado febrero y un reguero de recursos presentados por Foro y PP, la situación de los socialistas está al límite. "No sabemos lo que va a pasar en el pleno de hoy", reconocía esta mañana un portavoz de la Federación Asturiana del PSOE. En cualquier caso el partido insiste en que todas las decisiones se han tomado siguiendo las recomendaciones de la secretaria municipal para garantizar su validez legal.

El partido busca una solución excepcional: que la gestora conduzca a la celebración de elecciones anticipadas, algo que solo puede autorizar el Consejo de Ministros. En frente tiene a los ediles de Foro y PP, dispuestos a terminar con el desgobierno.

En cualquier caso, el problema en que se ha metido el PSOE en Cudillero ha partido de un error de estrategia que el propio partido reconoce. "Es difícil convencer a quien no quiere. Pero quizá hubiera sido aconsejable haber insistido para que el sustituto del alcalde fuese alguien de las listas", se lamenta una fuente interna. Hasta que se tome una decisión y se valide jurídicamente, Cudillero estará  gobernado provisionalmente por la edil Olga Fernández.