El fuego devora en una semana casi el 20% de lo quemado en todo el año

El fuego ha abrasado en la última semana en torno a 5.900 hectáreas de terreno en cinco comunidades, casi un 20% de la superficie incendiada en lo que va de 2013. En los últimos cinco días se han producido dos de los tres peores incendios del año: el de Cualedro (Ourense) y el de Villardiegua de la Ribera (Zamora), con 2.200 y 2.682 hectáreas arrasadas, respectivamente. El que tuvo lugar en Andratx (Mallorca) a finales de julio arrasó más de 2.300.

Además de estos dos grandes incendios —como califica Medio Ambiente a los que queman más de 500 hectáreas—, el fuego ha acabado desde el pasado lunes con 480 hectáreas de vegetación en Artà (Mallorca), 250 en Tres Cantos (Madrid), 210 en Santibáñez El Alto (Cáceres) y 100 en El Viso (Toledo), además de otra quincena de pequeños fuegos y conatos.

Hasta el 18 de agosto, la última fecha con cifras oficiales consolidadas, habían ardido 26.785 hectáreas, la cifra más baja en la última década, según el Ministerio de Agricultura y Medio Ambiente. Se trata de un tercio de la media de los últimos diez años, aunque 2013 ha dejado de ser el año más tranquilo del último medio siglo, como se mantuvo hasta el 11 de agosto. La superficie calcinada en 2013 es, además, seis veces menor que el área que se vio afectada durante los mismos ocho meses del año pasado, cuando quedaron arrasadas 166.295 hectáreas, según ha informado el Ministerio de Agricultura y Medio Ambiente. El 44% de los fuegos se ha producido en el noroeste peninsular y el 33%, en Comunidades del interior de la Península. Al menos 10 incendios continuaban activos a última hora de ayer en Castilla y León, Cataluña y Galicia. El último, desencadenado en torno a las cinco de la tarde de ayer en Flix (Tarragona), obligó a cortar la carretera secundaria entre esta localidad y su vecina Ascó y a interrumpir el servicio de cercanías. El espacio calcinado no ha sido perimetrado todavía.

El fuego de mayores dimensiones de este año ha sido de momento el de Villardiegua de la Ribera (Zamora), que arrasó 2.672 hectáreas. Se inició en Portugal, pero por los fuertes vientos del oeste saltó el río Duero y pasó a España en la tarde del jueves. Unos 80 vecinos de la localidad afectada tuvieron que ser desalojados y fue dado por estabilizado a última hora del sábado. En dirección contraria, el incendio que ha arrasado más de 2.200 hectáreas en tres lenguas entre Cualedro y Monterrei (Ourense), saltó a Portugal el fin de semana. La Xunta lo dio por estabilizado el domingo, pero investigará los 12 fuegos desatados en un solo municipio en una semana, porque la consejera de Medio Rural, Rosa Quintana, no cree “en casualidades”.