La Guardia Civil ratifica que el chófer del autobús de Ávila se durmió

La Guardia Civil ha ratificado este martes ante el juez el atestado que redactó sobre el accidente de autocar ocurrido en Tornadizos (Ávila) en el que murieron nueve personas, en el que figura que el conductor les dijo que pudo haberse dormido, mientras su abogado ha reiterado que su defendido no manifestó que se durmió.

"Mi defendido declaró en sede judicial –el día del accidente– que no había dicho a los agentes que se había dormido', ha comentado el abogado del conductor, Miguel Bernal, a los periodistas tras la declaración de los tres agentes que realizaron el atestado en el que, según explicaron fuentes jurídicas tras los hechos, sí hicieron constar que R.G.S. admitió en el lugar del suceso que podría haberse quedado dormido.

Horas más tarde del siniestro, pero ya ante la juez, el conductor señaló hace un mes a preguntas del fiscal que "dormido no se quedó" y que "tampoco dio ninguna cabezada", tal y como figura en su declaración de ese día.

Según ha explicado Óscar Barrios, el fiscal que ha asistido a las declaraciones por separado de los agentes, los tres "se han ratificado en el atestado" redactado el pasado 8 de julio tras el accidente, sin desvelar más detalles de su testimonio.

En este sentido, ha coincidido con el abogado del conductor, que al salir de los Juzgados ha dicho que "la Guardia Civil se ratifica en su versión y ya está", sin precisar si los tres guardias habían dicho lo mismo: "Eso me lo reservo. Esa es una valoración que no puedo hacer ahora".

Respecto a si el contenido global de la declaración de los agentes había arrojado algo más de luz sobre el caso, el fiscal ha explicado a Efe que su testimonio "ha aportado cosas nuevas", aunque ha puntualizado que en general "más de lo que se supiera no".

Óscar Barrios ha explicado que en la actualidad se está a la espera de lo que determine el informe técnico que según señaló ayer el TSJCyL posiblemente estará terminado en septiembre, incorporándose así a una instrucción que el fiscal espera que esté concluida "en otoño".

En este contexto, el abogado del conductor no se ha pronunciado sobre el origen del siniestro "hasta que no haya un informe técnico", ya que asegura "no estar capacitado para opinar" al respecto.

Tal y como hizo a la entrada a los Juzgados, Miguel Bernal ha expresado su "confianza absoluta en la Justicia y en la Guardia Civil", así como en los informes técnicos que son los que "van a aclarar la forma en la que se produjo el accidente".

Respecto al estado de R.G.S., de 54 años, su abogado ha afirmado que "está muy abatido y tampoco en una situación como para ahondar sobre un drama que le afecta a muchísima gente y también le afecta a él".

Tras las declaraciones de los guardias civiles durante una hora hoy, mañana será el turno de cuatro de las 22 personas que resultaron heridas, mientras que el jueves están citados también como testigos otros seis pasajeros y dos técnicos de Cevesa, la empresa del autobús siniestrado.

Se cerrará el turno de declaraciones el viernes, cuando acudirán a declarar otros cinco pasajeros del autobús, ya que otros tres que han sido citados han solicitado al Juzgado un cambio de fecha por no estar aún en condiciones adecuadas de salud para hacerlo, según ha informado hoy el TSJCyL.

En el proceso se han personado hasta el momento el conductor, la compañía aseguradora del autobús y otras siete personas más entre las que figuran familiares de los nueve fallecidos en el accidente y varios pasajeros.