Un detenido agrede en los calabozos al juez del ‘caso Madrid Arena’

El juez Eduardo López-Palop, que instruye el caso Madrid Arena, ha sido agredido hoy en los juzgados de Plaza de Castilla por un detenido para el que acababa de decretar prisión, que le ha golpeado, si bien no ha llegado a causarle lesiones de gravedad. La agresión se produjo después de que el juez le informase de que iría a prisión. El agresor aprovechó un despiste de los funcionarios de prisiones (los calabozos de los juzgados pertenecen a Instituciones Penitenciarias), se abalanzó sobre él y le golpeó. También resultó contusionada la fiscal, embarazada, que se hallaba al lado del magistrado, en los calabozos de los juzgados de Madrid.

El suceso ha ocurrido esta mañana cuando el magistrado, que estaba de guardia de detenidos en Plaza de Castilla, ha decretado prisión para uno de los arrestados, de origen argelino, que cuenta con numerosos antecedentes por robo con violencia.

Los jueces tienen habilitada una sala en los calabozos para interrogar a los detenidos y evitar así el trasiego de reos que les lleva la policía subiendo y bajando de las plantas donde tienen sus despachos los magistrados. Según fuentes jurídica, la agresión se produjo al terminar el interrogatorio y ser conducido el agresor a una de las celdas, que están al lado de la sala en que los jueces interrogan a los detenidos. Cuando los funcionarios de prisiones abrieron la puerta de la celda en que se hallaba el detenido argelino (que ya sabía que iria a prisión) para llevar a otro detenido ante el juez, el agresor esquivó a los funcionarios, salió de la celda y se metió en la sala donde estaba el juez. Primero agredió a la fiscal e imediatamete después se abalanzó sobre López Palop, al que tiró al suelo y golpeó. Los calabozos de los juzgados de Madrid pertenecen a Instituciones Penitenciarias. Son como una prisión. Por dentro hay funcionarios y el exterior lo controla la Guardia Civil.

El agresor ya está en prisión, aunque al hecho por el que fue arrestado tendrá que sumar ahora un atentado contra una autoridad judicial. El juez no ha resultado herido aunque está afectado por el suceso y se ha mostrado muy preocupado por una de las fiscales que había en el despacho, que está embarazada. Eduardo López-Palop  continuó trabajando tras la agresión.