El Poder Judicial pide cambiar la ley hipotecaria por sus “disfunciones”

El vicepresidente del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Fernando de Rosa, ha defendido hoy una reforma de la ley hipotecaria tras admitir que la actual normativa está produciendo "disfunciones" por el elevado número de desahucios ordenados y el impacto social que conllevan. Los problemas derivados de las ejecuciones hipotecarias, que se han disparado desde el inicio de la crisis, es uno de los asuntos que se tratarán en la XXII edición de las jornadas de jueces decanos de España, que este año se celebran por primera vez en Barcelona con la asistencia de 46 magistrados.

El vicepresidente del CGPJ, que ha inaugurado las jornadas, ha admitido que existe un problema "social" derivado de las ejecuciones, por lo que sería necesaria una reforma de la ley. De Rosa ha insistido en que las propuestas de reforma de la legislación hipotecaria, que los jueces decanos "debatirán en profundidad" en estas jornadas, se plantearán "dentro del respeto al poder ejecutivo y al judicial".

Por ese motivo, el vicepresidente del Consejo ha resaltado que la judicatura está obligada a "aplicar la ley" y que la legislación "no puede ser sustituida por las iniciativas particulares" de uno u otro juez. De Rosa no ha querido avanzar qué línea seguirá la propuesta que salga de las jornadas, ya que ésta debe debatirse y consensuarse por los jueces decanos. "Será una propuesta desde la base de la pirámide y el Consejo intentará que se plasme después en normas. Somos un termómetro de lo que está ocurriendo en la sociedad", ha dicho.

El vicepresidente ha añadido que el servicio de inspección del Consejo "analiza diariamente" lo que ocurre en los juzgados civiles, por lo que está constatando el impacto de los desahucios sobre los ciudadanos.

El PSOE pide al Gobierno "máxima urgencia"

Por su parte el PSOE, que presentó hace días una proposición de ley para cambiar la normativa de desahucios y que teme que ahora sea el Gobierno el que se apunte el tanto, ha iniciado hoy una campaña de ruedas de prensa por toda España para recordar su propuesta y ha reclamado a Mariano Rajoy que afronte la cuestión con la "máxima urgencia"; tras negociarla, eso sí, con los socialistas. "Proponemos al Gobierno encerrarnos en una habitación y que hasta que no tengamos un texto definitivo no salgamos de esa habitación", ha afirmado con tono dramático el secretario de Relaciones Institucionales del partido, Antonio Hernando.

El PSOE —que hace días pidió perdón públicamente por no afrontar esta cuestión de los desahucios en ocho años de Gobierno— cree incluso que el Ejecutivo del PP debería cambiar la normativa por decreto ley (una vez pactada la reforma con los socialistas en esa habitación) e iniciar los trámites parlamentarios a posteriori, según ha explicado la responsable de Economía del primer partido de la oposiciónl, Inmaculada Rodriguez-Piñero. "Igual que se hizo con las reformas financieras. Es urgente parar los desahucios", ha dicho. La nueva norma, sin embargo, no podría ser retroactiva, así que, de aprobarse, se aplicaría a hipotecas ya firmadas pero no a las familias que están ahora en fase de desahucio.

La propuesta del PSOE plantea una moratoria obligatoria de los desahucios (los bancos, al menos los que hayan recibido ayudas públicas, estarían forzados a negociar con la familia antes de ir a juicio, y durante esa negociación el desahucio se paralizaría), bajar los intereses de demora de la hipoteca, que el valor de subasta del inmueble impagado no supere el de tasación original y que las familias puedan llegar a un acuerdo con el banco para quedarse unos años en la vivienda pagando un alquiler barato. También establece que, para futuras hipotecas, el crédito no pueda superar el 80% del valor del piso ni la hipoteca pueda ser a más de 30 años.