Seguí: “Los presupuestos de 2013 no dan de sí para aumentar la velocidad”
Según un estudio del RACC, el riesgo de sufrir un accidente en la red de carreteras del Estado ha disminuido un 67% en la última década
Hay un margen para aumentar la velocidad en ciertos tramos de autopistas y autovías a 130 kilómetros por hora. Pero no en 2013. “Los presupuestos no dan de sí”, ha reconocido hoy la directora general de Tráfico, María Seguí, que ha supeditado la medida a que “las condiciones económicas mejoren”, a un “récord histórico” en baja accidentalidad en los tramos afectados y, en cualquier caso, siempre subordinado a las condiciones meteorológicas y las circunstancias del tráfico.
Durante la presentación de un informe del Real Automóvil Club de Cataluña (RACC) sobre la accidentalidad en las carreteras españolas, Seguí ha confirmado que el borrador del Reglamento General de Circulación estará listo a finales de año e incluirá “la reducción inmediata” de la velocidad en carreteras convencionales a 90 por hora –ahora se puede circular a 100 en las vías con un arcén igual o superior a un metro y medio-. Sobre el aumento de velocidad, ha afirmado que el nuevo código incluirá la posibilidad de limitar a 130 por hora en los tramos que cumplan con las condiciones de seguridad necesarias, para que “cuando sea factible ya se pudiera realizar”.
El director de la Fundación RACC, Miquel Nadal, también se ha mostrado a favor de reducir la velocidad a 90 por hora en las vías convencionales, donde la posibilidad de sufrir un accidente es tres veces superior que en autopista y autovías, según el estudio que hoy ha presentado el club de automovilistas sobre la evolución de la accidentalidad en las carreteras españolas.
De acuerdo con los datos de la investigación, el riesgo de sufrir un accidente mortal o grave en la Red de Carreteras del Estado (23.000 kilómetros) ha descendido en un 67% en los últimos 10 años en términos globales. Pero ese descenso no ha sido equilibrado. Ha sido mayor en autopistas y autovías que en las carreteras convencionales.
Cuando se apruebe el nuevo código, la reducción a 90 en vías convencionales se hará de forma "inmediata"
También existen grandes diferencias en cuanto a las comunidades autónomas. Aunque todas han experimentado mejoras, el progreso también ha sido desproporcionado. “Las comunidades que estaban mejor, son las que han mejorado más, mientras que las que estaban peor, han mejorado pero en menor proporción”, ha señalado Miquel Nadal.
Castilla y León, Aragón y Galicia son las tres autonomías con más riesgo de sufrir un accidente. En el lado opuesto, Madrid, Cataluña y Asturias encabezan las comunidades con menos probabilidad de sufrir un siniestro de tráfico. Como ejemplo, el riesgo de morir en un accidente de tráfico en Castilla y León es 2,5 veces más alto que en Madrid. “Estas diferencias son objeto de reflexión cuando diseñamos las políticas públicas”, ha señalado Nadal, que ha apostado por centrar la atención en las autonomías con una accidentalidad claramente superior a la media.
El director de la Fundación RACC ha insistido en la importancia de “asegurar el mantenimiento de las carreteras” a pesar de la crisis económica. “Nos estamos jugando mucho”, ha aseverado. En cuanto al debate del pago por uso, se ha mostrado a favor de “un modelo equilibrado” en toda España, sin diferencia entre unas y otras regiones, aunque ha alertado sobre los efectos que podría tener la implantación de peajes. “Se produciría probablemente un trasvase de tráfico hacia vías convencionales”, ha advertido, donde actualmente se produce el 50% de los accidentes mortales y graves de la Red de Carreteras del Estado.
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