El PP carga con dureza contra Cascos por el adelanto electoral en Asturias

"Soberbio", "irresponsable", "sin cintura"... Al presidente de Asturias, Francisco Álvarez Cascos, le han llovido hoy calificativos críticos de parte de todas las fuerzas políticas excepto la suya, el Foro Asturias, por su decisión de convocar elecciones generales anticipadas en la comunidad para el 25 de marzo. Los grupos han censurado de forma unánime el adelanto de los comicios, pero los reproches más duros le han llegado de parte de su antiguo partido, el PP, al que abandonó hace solo 13 meses para liderar su propia formación. Los populares le han tachado de "incapaz" para liderar un Ejecutivo en minoría: "Cascos o manda o no sabe gobernar", ha dicho el vicesecretario de comunicación del PP, Esteban González Pons.

Mariano Rajoy ya expresó ayer sus dudas por el adelanto electoral. El presidente del Gobierno aseguró que tres elecciones en diez meses le parecían "demasiadas", pero fue el menos duro con la actuación del exdirigente de su partido. El PP ha salido hoy en tromba en contra de Cascos: el portavoz del grupo popular en el Congreso, Alfonso Alonso, ha hablado de la decisión del presidente de Asturias como una medida "extrema", que evidencia que Cascos no ha respondido a las expectativas que había generado en muchos ciudadanos, porque carece de "una cualidad indispensable para un Gobierno, que es dialogar, tener cintura y llegar a acuerdos". Alonso ha llegado a decir que el mandato de Cascos ha quedado reducido a "una aventura de siete meses". "Yo también he gobernando en minoría mucho tiempo, sé que es muy difícil e incluso uno se puede enfadar, pero hay que contenerse, seguir trabajando y tratar de buscar acuerdos", le ha afeado al exsecretario general del PP. La líder de los populares catalanes, Alicia Sánchez Camacho, ha añadido que la convocatoria de elecciones perjudica la economía de la región, porque genera "inestabilidad" e "incertidumbre".

La izquierda ha recordado, por su parte, que la crisis en Asturias está motivada por la "batalla" en el seno de la derecha asturiana. "Ya es habitual que Álvarez Cascos esté enzarzado entre facciones de la misma derecha", ha afirmado el secretario de relaciones internacionales del PSOE, Gaspar Zarrías, que ha añadido que ya sea "juntos o revueltos", el PP y el Foro están instalados "en la pelea interna desde hace años y empeñados en trasladar sus problemas domésticos a la vida de los asturianos, que necesitan un Gobierno que se haga cargo del futuro de Asturias, que cuenta ya con más 90.000 desemplados". Idéntico diagnóstico ha hecho el candidato a secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, para quien la decisión de Cascos "es una demostración del fracaso de la derecha asturiana". El diputado de Izquierda Unida, Gaspar Llamazares, comparte la tesis: "Asturias es el primer fracaso del gobierno de la derecha. La soberbia de Cascos y la venganza del PP terminan en elecciones anticipadas", ha escrito en la red social Twitter.

El portavoz del PSOE en el Congreso, José Antonio Alonso, ha replicado a Cascos que la responsabilidad de la aprobación de los Presupuestos de la comunidad era suya y de su partido —el presidente asturiano habló de “compló parlamentario” del PP y del PSOE para hacer ingobernable la región— y ha lamentado que la derecha solo vea en Asturias “un campo de batalla donde enredar con sus intereses particulares”.

El propio Cascos ha rechazado confirmar si volverá a presentarse, pero sí ha dicho que no se irá “por presiones”.