Camps y Costa recusan tarde al jurado
El juez rechaza apartar del tribunal popular a una candidata por el PSOE en Alpuente
Una candidata del PSOE en las municipales del pasado 22 de mayo podría formar parte del jurado que juzgará al expresidente de la Comunidad Valenciana Francisco Camps (PP) por recibir trajes de la trama Gürtel. La cercanía de esa posible integrante del tribunal popular al principal partido de la oposición en las Cortes Valencianas puede resultar sorprendente. Sobre todo, porque la acusación popular la ejercen cuatro diputados socialistas, encabezados por su exportavoz Ángel Luna.
Pero la culpa, según el Tribunal Superior de Justicia Valenciano (TSJCV), es solo de Camps —y de su compañero de banquillo Ricardo Costa—, por no haberlo denunciado a tiempo. La candidata, por lo tanto, puede ser seleccionada para juzgar al expresidente. Y no hay más que hablar.
Beatriz Fababuj se presentó como candidata a las locales en Alpuente, un pueblecito de 817 habitantes al norte de Valencia. Lo hizo por la lista del PSOE, como suplente número dos. Ese dato lo reveló el 30 de noviembre la defensa de Costa durante la vista que la Ley del Jurado prevé para analizar las excusas y recusaciones de los candidatos al tribunal. El ex secretario general del Grupo Popular en las Cortes aportó para ello la impresión de una página web en la que esta aparecía en las listas y, basándose en ella, la recusó en ese mismo acto. A la petición se sumó Camps.
Fababuj aseguró que no tenía interés en el caso y que era independiente
Ambos alegaron que Fababuj podría tener un interés en el proceso, una de las causas de prohibición para ser jurado que establece la ley que lo regula. El fiscal, sin embargo, se opuso, basándose en la declaración de Fababuj, que aseguró que negó tener interés en el resultado del juicio. Lo mismo que la acusación popular, encabezada por Luna, que añadió que la candidata afirmó que su intención fue participar en las elecciones como independiente.
El magistrado del TSJCV encargado de presidir el jurado, Juan Climent, rechazó la petición de los acusados en un auto que se dio a conocer ayer. Pero no lo hizo porque estos pudieran o no tener razón con la ley en la mano, sino porque Costa y Camps, que se enfrentan a una multa de varios miles de euros por un delito continuado de cohecho impropio, llegaron tarde con su petición.
Y llegaron tarde a pesar de conocer la posible incompatibilidad de Fababuj con suficiente antelación, según la resolución de Climent. La impresora con la que Costa estampó la página que acreditaba su participación en las elecciones dejó en el papel la fecha en que se hizo la copia, el 26 de octubre. Casi un mes después se abrió un plazo de nueve días —del 21 al 29 de noviembre— para alegar los inconvenientes que pudieran presentar los candidatos a jurado y recusarlos, si fuera preciso.
Climent sí admite las excusas de otros seis candidatos al estimarlas legales
A pesar de que supuestamente tenían en su poder desde hacía semanas la copia en papel de la página web (como atestigua la fecha de impresión), Camps y Costa no presentaron la recusación en ese plazo. Solo lo hicieron un día después de que finalizara, durante la vista del 30 de noviembre. “Que la candidata figurara en las listas (...) es un dato público y notorio que se ha producido con anterioridad al periodo hábil para el planteamiento de recusaciones (...) sin que ninguna de las dos partes ahora recusantes [Camps y Costa] haya hecho uso de su derecho a recusar”, recordó Climent en su resolución. El magistrado se basa además en la fecha de impresión de la página web para señalar que no la recusaron a tiempo a pesar de conocer de sobra esa posible incompatibilidad.
Camps aseguró al adherirse a la recusación planteada por Costa que no la había presentado antes porque solo conoció la condición de candidata de Fababuj al escuchar las preguntas que se le hicieron en la vista. Pero el magistrado le quita la razón al recordar que las listas tienen carácter “público y notorio”, y rechaza su petición por extemporánea.
Climent sí admite las excusas de otros seis candidatos al estimarlas legales. Tres de ellos porque superan los 65 años, la edad límite para serlo. Otra por tener a cargo a un hijo de dos años sin posibilidad de que alguien lo cuide. Uno más por sufrir cefaleas constantes y otra, embarazada, por tener previsto el parto para las fechas del juicio. Estos no formarán parte de los nueve miembros del tribunal, que se designará el próximo lunes. Pero Fababuj sí podría entrar en él.
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