Rajoy insiste en sus prioridades: el objetivo de déficit y los deberes de la UE

Lograr el objetivo de déficit y "hacer todo lo que haya que hacer" para no estar en el segundo vagón de Europa en el escenario de una UE a dos velocidades. Es lo primero, lo imprescindible para el futuro presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, según los mensajes que ha lanzado esta mañana la secretaria general del Partido Popular, María Dolores de Cospedal, tras la reunión del Comité de Dirección Nacional.

"Las cuatro prioridades de Rajoy", ha señalado Cospedal, son "Europa, el control del déficit público, donde nos jugamos la credibilidad de España, y está fuera de toda duda que el PP vaya a cumplir con el objetivo de déficit; el saneamiento del sistema financiero y la reforma laboral". Estas prioridades, que prevén el cumplimiento del 6% este año y 4,4% en 2012, han sido el el eje del mensaje que el líder del PP ha querido trasladar en todas sus reuniones hasta hoy.

El ganador de las elecciones ya ha mantenido conversaciones con una veintena de líderes internacionales,  banqueros y representantes del mundo financiero y económico, y ahora acelera su agenda al reunirse con la patronal y los sindicatos.

Cospedal ha hablado de fechas clave, que, además del calendario del traspaso de poderes que se pusieron en marcha la semana pasada Soraya Sáenz de Santamaría y Ramón Jáuregui, incluyen el Ecofin de mañana y la cumbre del Partido Popular Europeo que se celebrará en Marsella el 8 de diciembre. Todas las alusiones a Europa de la intervención de la dirigente popular suponen una ecuación que solo sitúa en el escenario de nuevos compromisos económicos y futuros recortes. Y todas pretenden transmitir confianza a las instituciones comunitarias. "Es un momento de cumplir y cumplir entre todos", ha dicho Cospedal. "El momento de premiar a los que cumplan y exigir responsabilidades".  Esto es: "Se debe ayudar los países que piensan cumplir sus compromisos".

"Entendemos que el BCE tiene una función importante que cumplir", ha añadido Cospedal, "y Rajoy ha dejado claro que no es deseable que exista una Europa a dos velocidades. Si se produjera, el presidente hará lo posible para estar en la primera".