Correa se queda en la cárcel

La Policía ya lo había adelantado. Y ahora la Guardia Civil lo ha ratificado. Los medios telemáticos no pueden garantizar con plena y absoluta fiabilidad, el control de una persona mediante el empleo de sistemas electrónicos. La rotundidad con la que las fuerzas de seguridad han plasmado en sus informes que los medios telemáticos no anulan las posibilidades de fuga del cabecilla de la trama Gürtel, Francisco Correa, en el caso de que sea puesto en libertad, desembocarán, inevitablemente, en su permanencia en la cárcel. El magistrado del Tribunal Superior de Justicia de Madrid, Antonio Pedreira, había encargado estos informes después de que la sala de lo Civil y Penal del mismo tribunal instara a su puesta en libertad siempre que hubiera medios telemáticos que garantizarán, con absoluta fiabilidad, su control.

En cualquier caso, el juez ha dado traslado a las partes de los informes para que presenten alegaciones sobre las conclusiones de las fuerzas de seguridad.

La policía ya había emitido su informe, tras consultar con Instituciones Penitenciarias y la Subdirección General de Planificación y Coordinación Interinstitucional de la Delegación del Gobierno para la Violencia de Género. Ahora lo ha hecho la Guardia Civil en el mismo sentido. En su escrito, el Instituto Armado ensalza los beneficios del uso de estos sistemas en algunos casos pero al tratar el concreto de Correa, sostiene que “no sólo se debe considerar la voluntad inequívoca de sustraerse a la acción de la justicia, sino que tiene que tener posibilidades reales de poder llevarlo a cabo”. Así, señala que el cabecilla de la trama Gürtel se enfrenta a posibles condenas por delitos graves, penadas con varios años de ingreso en prisión, “lo cual podría generar esa voluntad y determinación de abandonar el país” y añade que “de las investigaciones ya realizadas, se determina, de forma prácticamente inequívoca, que dicho sujeto podría contar con negocios, recursos económicos y propiedades en varios países, lo que le posibilitaría el poder hacerlo con la fiabilidad y perdurabilidad necesarias para sustraerse a la acción de la Justicia española”.

El cabecilla de la trama Gürtel ha reclamado su puesta en libertad hasta en ocho ocasiones

Correa lleva dos años y ocho meses preso y fue detenido después de que el juez Garzón, primer instructor del caso, conociera, a través de escuchas telefónicas, que pretendía huir a Panamá o Colombia. Ha pedido su puesta en libertad hasta en ocho ocasiones, tanto antes como después de que la decisión de la sala de la Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de Madrid y de la resolución del propio Pedreira, por la que le decretó la posibilidad de salir en libertad previo pago de una fianza de 15 millones de euros.

En su informe, la Guardia Civil explica el funcionamiento de los equipos, desarrollados por la empresa israelí Elmotech. Se trata de dispositivos, generalmente colocados en el tobillo o en la muñeca, con un transmisor con batería, que envía señales de localización vía GPS a una central de control. El mecanismo también permite comunicar la pérdida de señal GPS, la descarga de batería o el funcionamiento anómalo del sistema, con el objeto de proceder a la resolución del incidente.

Al igual que indicaba el informe de la policía, este afirma que la correa con la que se sujeta el dispositivo está sellada “con un cierre que no puede ser abierto sin destruirse” pero advierte que “no resulta imposible la ruptura de la correa o el cierre”.